Zaragoza.- "Confío en que empresa y trabajadores se planteen una solución pactada antes de que estalle el conflicto". Es el mensaje del alcalde de Zaragoza, Pedro Santisteve, después de que el 80% de la plantilla aprobaran este jueves ir a la huelga durante las próximas Fiestas del Pilar.
De esta forma, el primer edil espera que las negociaciones en los servicios de mediación y arbitraje encuentren un punto de acuerdo entre ambas partes y se puedan evitar los paros durante los días más destacados de la capital aragonesa. En cualquier caso, Santisteve ha garantizado que su equipo de gobierno “va a intentar que las afecciones sean mínimas, con el refuerzo de autobuses".
No obstante, el alcalde ha afirmado que desde el Ayuntamiento deben mantenerse al margen de este conflicto al tratarse de un asunto privado. "Ocupamos una segunda posición y no queremos que el Consistorio sea utilizado en conflictos privados. Debemos ser respetuosos y dejar a las instituciones especializadas que medien en el conflicto", ha resaltado.
En cuanto a los posibles servicios mínimos que tendría que decretar el Consistorio, Santisteve ha abierto la puerta a que sean más altos. “Las circunstancias serán las adecuadas a la situación especial de las Fiestas del Pilar", ha concluido.
Otro frente abierto que tiene abierto el Ayuntamiento para las próximas fiestas es la ubicación de la carpa de Interpeñas, que se ha quedado sin los espacios de Valdespartera y Parking Norte. Ante esta situación, Santisteve ha afirmado que deben ser "respetuosos con la normativa y con las medidas de seguridad", así como mantener la "libre competencia y la igualdad de oportunidades".
Tranvías de Zaragoza ve la huelga "llena de irregularidadades"
Por su parte, la empresa de Tranvías de Zaragoza ha manifestado su postura al respecto tildando la decisión como "unilateral y llena de irregularidades". La no aprobación del Comité de Empresa, la realización de un referéndum sin un censo laboral, y una votación realizada sin cualquier supervisión/control", han explicado desde la Dirección, "son algunas de las irregularidades llevadas a cabo por el Sindicato Ferroviario, que dejan patente su irresponsabilidad y nulo compromiso al utilizar unas fechas tan señaladas para hacer una serie de nuevas reivindicaciones carentes de fundamento, con un Convenio Colectivo en vigor".
En este sentido la Dirección considera "evidente" que el propósito del Sindicato Ferroviario es "llevar a cabo un chantaje a la empresa y a la ciudad, tomando como rehenes a los zaragozanos, y a los miles de visitantes que acuden en estas fechas y que merecen encontrarse una Zaragoza que ofrece unos servicios de calidad, convocando una huelga llena de irregularidades".
