PASARÁN SEIS MESES EN ESTA MISIÓN

Un contingente de 300 militares viaja de Zaragoza a Letonia para ayudar a los países bálticos y Polonia

Más de 300 personas forman el contingente que ha partido este jueves desde Zaragoza rumbo a Letonia. Allí pasarán seis meses de misión, en respuesta a la ayuda solicitada por los países bálticos y Polonia a los aliados de la OTAN. El frío es la principal diferencia con otras misiones desarrolladas en países como Irak o Afganistán.

Zaragoza.- Un contingente formado por más de 300 personas ha partido este jueves desde el Aeropuerto de Zaragoza rumbo a Letonia. La mayoría son militares de Zaragoza y Gerona, pero los hay de otras partes del país. En Letonia pasarán seis meses de misión, en respuesta a la ayuda solicitada por los países Bálticos y Polonia a los aliados de la OTAN. Esta vez es un destino europeo y en una zona segura, pero aún así los familiares y amigos no han podido contener la emoción de la despedida a primera hora de la mañana.

El jefe del Contingente desplegado en Letonia, Luis Manuel Benítez, que también es teniente coronel de Infantería y jefe del Batallón Mecanizado que está en Gerona, ha explicado que esta misión es fruto de un convenio entre los aliados de la OTAN en la Cumbre de Varsovia. "España ha respondido y por eso enviamos fuerzas participando con ellos", ha explicado. Para esta misión se ha formado un batallón multinacional que está integrado en una brigada letona, que ayudarán a los aliados "en todo lo que necesiten, tanto disuasión como defensa", ha aclarado el jefe del Contingente. La mayoría son militares que trabajan en Cataluña y Aragón. Además, ha añadido, "hay alguna unidad de Madrid y otros sitios, pero el grueso es de Zaragoza y Cataluña".

Una de las principales diferencias con misiones anteriores es la meteorología que les espera en Letonia. "Las temperaturas en Riga son bajísimas. Este mismo jueves se esperan hasta -9 grados y es posible que en marzo sigan bajando", ha subrayado Benítez. "Para nosotros es una novedad", ha remarcado, porque los escenarios que ha tenido en otras misiones son desérticos, como Afganistán o Irak. "Esta vez vamos a trabajar con nueve y frío extremo, que para nosotros es muy interesante porque es una oportunidad para instruirnos en este tipo de operaciones", ha añadido Benítez.

Aunque es un destino europeo, los familiares y amigos no pueden contener la emoción de la despedida
Aunque es un destino europeo, los familiares y amigos no pueden contener la emoción de la despedida

Habrá nieve, sí, pero también un ambiente multinacional. "Será todo en inglés, porque vamos a trabajar sobre todo con los canadienses y los letones, pero también hay eslovenos, italianos, checos, y de otros países", ha puesto de manifiesto el jefe del contingente, para quien esta es su cuarta misión.

Otra de las diferencias es que en las anteriores los destinos eran países en zonas en conflicto, "donde salir es peligroso", pero en esta ocasión "vamos a un país de la Unión Europea, donde, de vez en cuando, nuestra gente tiene algún permiso y puede salir a la calle sin problema porque es una zona segura". Además, Benítez ha hecho también hincapié en la importancia de la misión. "Unos países aliados han solicitado ayuda y nosotros tenemos la suerte de poder apoyarles y demostrar lo que sabemos", ha concluido.

Para algunos de estos militares es la primera misión, y buscan el consuelo de las nuevas tecnologías para seguir en contacto diario con sus familiares y amigos. "Podremos hablar con él e incluso ir a verle aunque sea una vez", decían algunos familiares, que se mostraban "resignados" a la despedida, decían por un lado; pero también "orgullosos por la labor que hacen en todas las misiones", agregaban.