Las tres provincias aragonesas quedarán confinadas de forma perimetral desde este viernes y hasta el 30 de noviembre. Las medidas, anunciadas ayer por la consejera de Sanidad, Sira Repollés, afectarán durante todo el mes. El Boletín Oficial de Aragón ya las recoge a pesar de dar un margen de dos días.
De esta manera, la provincia de Zaragoza, la de Huesca y la de Teruel quedarán confinadas al final de esta semana. Aragón como comunidad también lo estará. Las medidas restrictivas son “muy importantes” para la actuación del Gobierno, y aseguraron que no descartan pedir el confinamiento total.
Sin embargo, hay una serie de excepciones que permitirán a las personas circular con libertad por las zonas afectadas. En primer lugar, la asistencia a centros sanitarios. El cumplimiento de obligaciones profesionales, la asistencia a centros educativos, el retorno al lugar de residencia o la atención a dependientes también será posible. También se podrán resolver cuestiones oficiales, así como exámenes y otras causas de fuerza mayor.
Faltan por darse a conocer todavía el resto de restricciones, que se publicarán a lo largo de esta semana. En toda la comunidad se cerrará la actividad catalogada como “no esencial” a las 20.00 horas, afectando a toda la hostelería, comercio y actividades culturales. También han solicitado que las personas limiten sus reuniones a los convivientes y amenazan con un confinamiento total.
Junto a estas medidas, el Ejecutivo presidido por Javier Lambán ha añadido algunas cuestiones. Al confinamiento perimetral y las restricciones de circulación se añadirá el cierre total de gimnasios, casas de apuestas y salones de juego.
