La Sociedad Deportiva Huesca cayó derrotada por cero goles a uno en la visita del Barcelona a El Alcoraz. Los de Míchel se vieron superados en la primera parte, donde De Jong hizo el único gol del encuentro en el minuto 27, y equilibraron algo más las fuerzas en el segundo tramo, aunque con más convicción que capacidad real para crear peligro. Las dificultades en fase ofensiva volvieron a condenar a los oscenses, que cosechan así una nueva derrota en liga y siguen ocupando el último puesto de la clasificación.
Comenzó el partido con ambos equipos tanteándose. El Barça merodeaba el área oscense y los de Míchel se estiraban para buscar la contra tras robo. La primera ocasión llegó en el minuto 6, con un remate a bocajarro de Pedri desde la frontal del área pequeña que intuía y detenía Álvaro Fernández. Superados los compases iniciales, a los locales cada vez les costaba más salir de su campo y los de Koeman se asentaban sobre el césped de El Alcoraz, haciendo circular la pelota a pesar de que el Huesca juntaba mucho las líneas para defenderse.
Sobrepasado el primer cuarto de hora, Pulido salvaba un gol cantado al desviar con la cara un potente remate de Dembelé, que de no haber encontrado la oposición del central hubiera celebrado el primer tanto del partido. Poco después, el atacante francés servía un centro medido a Pedri, que no acertaba a dirigir su cabezazo entre los tres palos. Era la antesala del gol, en una acción similar pero con Messi en el papel de Dembelé y De Jong en el de Pedri: balón al área del argentino desde la izquierda y el holandés ponía el interior de la bota para encontrar la red.
Para entonces, el Barcelona era dominador absoluto del encuentro, los de Míchel disponían del balón a cuentagotas y cuando eso sucedía lo perdían enseguida, sin posibilidad de construir. En el minuto 40, Messi disponía de un lanzamiento de falta, salvaba la barrera y obligaba a Álvaro Fernández a emplearse a fondo y volar al palo corto para desviar la pelota a córner. Fue la última acción de peligro del primer acto y ambos equipos se marcharon a vestuarios con sensaciones muy dispares.
Segunda parte
El guion no cambió tras el entretiempo, pero el Barça no se mostraba tan incisivo como en la primera parte y le costaba más generar peligro real, gracias a que los de Míchel llegaban antes a cerrar filas. En el 56, Siovas despejaba un balón de Dembelé que superó a Álvaro Fernández y caminaba hacia la portería, aunque muy lentamente y sin apenas posibilidades de acabar en gol. Messi lo volvía a intentar con un tiro desviado antes de que el Huesca tuviese su primera ocasión del choque, con un tacón de Rafa Mir a la salida de un córner que estuvo cerca de superar a Ter Stegen.
Respondían los culés con una nueva asociación entre Pedri y Messi, que trazaban una pared para que el argentino se quedase solo ante Álvaro, pero su zurdazo se estrellaba contra el meta. Ferreiro, Juan Carlos y Okazaki saltaban al césped para buscar la reacción de los oscenses, que encaraban los últimos veinte minutos de partido perdiendo por la mínima. Así, el Huesca se iba hacia arriba y dejaba espacios atrás, que el Barça trataba de aprovechar para duplicar su ventaja, aunque sin éxito.
El choque enfilaba ya sus últimos diez minutos y el Huesca no renunciaba al gol del empate. Aunque aumentaba su presencia en el área rival, no era motivo suficiente como para romper la defensa blaugrana. Lo intentaban Okazaki primero y Juan Carlos después, pero sus disparos terminaban en las manos de Ter Stegen. A pesar de que los últimos minutos se vivieron en el área blaugrana, el marcador no se movió y el Huesca volvió a caer derrotado, esta vez a manos de un Barça al que le bastó un buen primer tiempo para doblegar a los altoaragoneses.
