Nuevas tecnologías, talento y reindustrialización, claves para la recuperación económica tras la Covid

El consultor estratégico en empresas y start-ups y expresidente de Telefónica España, Luis Miguel Gilpérez, en el Foro ADEA
photo_camera El consultor estratégico en empresas y start-ups y expresidente de Telefónica España, Luis Miguel Gilpérez, en el Foro ADEA

En un momento como el actual, la Asociación de Directivos y Ejecutivos de Aragón (ADEA) decanta sus esfuerzos en la búsqueda de las claves para la reconstrucción económica de la Comunidad aragonesa. En esta línea, el nuevo Foro ADEA, celebrado este jueves, ha contado con la presencia del consultor estratégico en empresas y expresidente de Telefónica España, Luis Miguel Gilpérez, que ha centrado su exposición en la “España 5.0: Hacia un nuevo modelo de reindustrialización”.

En la jornada se ha hecho hincapié en la retención del talento, la reindustrialización y la implementación de las nuevas tecnologías como ejes centrales de actuación.

Frente al impacto de la crisis sanitaria y económica que ha puesto de manifiesto la escasa digitalización de nuestro país, Gilpérez apuesta por “hacer de la necesidad virtud y convertir esta crisis en una oportunidad”. “La necesidad- ha asegurado- es la digitalización en España y, en particular, de la Administración Pública y de las pymes”. La oportunidad, defiende el consultor, es la de lograr como país reducir la brecha digital.

En este sentido, Gilpérez focaliza su apuesta por la España 5.0 para dejar atrás cifras que ha puesto de manifiesto frente a los participantes del Foro: “Actualmente, el 42% de la población adolece de capacitación básica para el uso de herramientas digitales, y en las ciudades hay 15 puntos porcentuales de diferencia con respecto al entorno rural en esta competencia”.

En concreto, y según ha expresado Gilpérez en la ponencia, “la estrategia para la transformación pasa por determinar un plan integral y disruptivo que, necesariamente, debe apoyarse en infraestructuras y tecnologías” como -según ha citado- las redes de ultrabanda ancha, fibra y 5G puro, la nube y la inteligencia artificial entre otros. “Hay que competir con el resto de Europa utilizando herramientas digitales; está comprobado que cuando crece la inversión en nuevas tecnologías, crece el PIB”, ha explicado el consultor para argumentar su propuesta, que facilitaría la reindustrialización del país.

Asimismo, otro de los caminos que debe seguir la economía es el de la “España sostenible”, de manera que se aproveche todo el potencial que España tiene para desarrollar la energía solar. De hecho, el consultor ha augurado que, al menos, el 60% de la energía española deberá ser renovable en 2030 y -advierte a las empresas- “debemos colaborar en ese proceso de transformación”.

Por otra parte, -ha manifestado- “no debemos olvidar la formación a todos los niveles, con acciones de comunicación orientadas a difundir los nuevos servicios, las nuevas maneras de hacer las cosas”. Y todo esto -advierte- sin descuidar el talento nacional, “que debemos mimar para que se desarrolle en toda su plenitud, y conseguir que todos los que se fueron, vuelvan”.

Gilpérez señala que la transformación debe centrarse inicialmente en sectores que concentren más del 50% o 60% de aportación al valor agregado a la economía. Tecnologías de la información; Logística y transporte; Turismo; hostelería; Contenidos digitales; industria textil; Agricultura; Energías renovables y Automoción son, por tanto, los ámbitos de actuación.

Por último, el consultor ha apuntado a la internacionalización de la empresa como otro de los aspectos que deben priorizarse para alcanzar la recuperación: “Es necesario mejorar la competitividad de nuestras pequeñas y medianas empresas con más potencial exportador, ayudándolas a crecer y diversificarse”.

La cita ha concluido con la intervención del presidente de ADEA, Salvador Arenere, quien ha destacado “la necesidad latente de marcar objetivos a largo plazo para facilitar la recuperación económica” y ha puesto de manifiesto la importancia de una “verdadera colaboración público-privada” que ayude a lograr el avance común. Asimismo, Arenere ha remarcado la importancia de inyectar liquidez para salvar a las empresas.