Seis casas, una iglesia y una pantalla de cine, no hace falta nada más para organizar la muestra de cine más pequeña del mundo. La aldea sobrarbense de Ascaso, semiabandonada desde los años 60, celebra un año más estas jornadas dedicadas al cine pequeño, artesano, olvidado por los grandes circuitos comerciales pero con grandes historias que contar.
Durante cinco días, del 30 de agosto al 3 de septiembre, los cinéfilos podrán disfrutar de largometrajes en la era norte, de cortos en la borda del cine y de coloquios con actores y directores al finalizar el día. Actividades de cine a las que se unirán una cata de vinos, una exposición, la tradicional comida popular y un concierto de La Orquestina del Favirol.
