El Casademont Zaragoza se estrena con victoria en casa (96-64)

El Casademont Zaragoza ha arrasado en su primer partido ante su afición. Foto: Basket Zaragoza
photo_camera El Casademont Zaragoza ha arrasado en su primer partido ante su afición. Foto: Basket Zaragoza

El conjunto aragonés suma su segunda victoria del curso tras superar con contundencia a Monbus Obradoiro (96-64). Los rojillos salieron en tromba e hirieron de muerte a su rival en el primer cuarto (+20) para encarrilar un triunfo en el que fue aumentando paulatinamente su ventaja para firmar un triunfo incontestable. El mejor regalo de bienvenida para la ‘marea roja’ y, especialmente, para los 900 abonados que se estrenaban esta campaña.

Uno de esos arranques brutales de Casademont Zaragoza marcó el inicio del combate. Radovic abrió la lata y capturó el rebote en defesa para el 4-0 de Justiz. Aunque había salido anotador el equipo, la tostada se cocinaba en defensa. Seeley completó otra defensa asfixiante y Radovic redondeó el 8-0 para el tiempo muerto visitante (min. 2). Aunque Pozas de triple abrió la anotación visitante, los de Fisac seguían la inercia sumadora con Rado, Benzing y Vázquez con 4 puntos, tras rotar a Justiz (16-3, min. 5). Las rotaciones con Alocén, Brussino y Barreiro no bajaban el pistón, con el 3+1 de Benzing y el 24-6 para asestar un golpe de efecto al asunto. Casademont Zaragoza se afilió al 2+1, Barreiro amplió al 30-9 en rojo y cerrar el cuarto con un 32-12 memorable.

La cosa seguía igual e incluso en máxima diferencia (+23) con el 37-14 que abría más la brecha, ante un conjunto gallego que, en apenas 3 minutos, tuvo que consumir otro tiempo muerto ante la adversidad. Hlineson a pista y Fisac dosificaba con las rotaciones el esfuerzo colectivo. Con el encuentro a favor de obra de los locales, ni Vasileiadis acertaba en el triple, no como Radovic tras una asistencia de DJ que levantó a la marea roja de los asientos, porque la tarde estaba de dulce y la defensa de manos rojilla daba rédito, con minutos para disfrutar. Pozas sumaba la tercera falta, Seeley firmó otro agujero y Radovic otra máxima diferencia 49-19. Así las cosas, debutó Javi García en la dirección de juego a 1.40 del descanso, compartiendo con San Miguel la dirección de juego para un descanso de ensueño 49-20.

Tras la pausa, Monbus Obradoiro intentó limar distancias, pero la empresa era complicada. Los de Fisac seguían a su ritmo. Mediado el cuarto, una técnica y una en ataque a Justiz, más otra a Seeley, enrabietaron a la marea roja, quien tampoco bajaba el pistón en la animación. Con todo y con eso, 57-28 mediado el acto. Krejci con un triple devolvió el +33 (66-33) para cerrar 71-38. Al último asalto, con la sensación de que el encuentro estaba solventado, Casademont Zaragoza no dejó de querer más (81-43). Javi García, mediado el cuarto, levantó a la grada, como Alocén en el 89-50, ‘Generación Z’ en estado puro con demostración de fundamentos.