Gran triunfo de las de Carlos Cantero que vale el pase a semifinales de la Copa de la Reina. Con un escenario idílico y con el público entregado, Casademont salió con la rasmia que le caracteriza a la pista. No le dio opción a su rival en los primeros diez minutos, que solo pudo anotar seis puntos en el primer cuarto. El conjunto maño estaba de dulce y disfrutó de su exhibición hasta el descanso. El equipo vasco fue a por todas y llegó a acercarse gracias a su buena actitud, pero la mejor versión de las aragonesas apareció en el momento clave del partido y no dio ninguna opción. El próximo sábado espera el Valencia, favorito para hacerse con el título, pero las aragonesas lo volverán a dar todo para la deseada final.
El partido comenzó con mucho respeto entre ambos equipos. El Araski golpeó primero, pero la buena defensa maña les frenó en el resto del primer cuarto. Las de Carlos Cantero fueron ganando protagonismo y desplegaron su juego sin ningún miedo. Gatling y Leo Fiebich serían las encargadas de tomar las riendas para poner la primera ventaja en el electrónico (9-2). El conjunto vitoriano intentaba reducir la renta, pero el poderío defensivo de Casademont no daba tregua. Con un parcial de 15 a 1, el Araski se vio obligado a pedir tiempo muerto para intentar parar la sangría de sus rivales. La buena dinámica de las anfitrionas continúo. Imani Tate pondría a las suyas más once para concluir el primer cuarto (17-6).
La firmeza del Casademont continuaba en el segundo cuarto. Al contrario, las vascas, sin ningún peligro ofensivo, eran espectadoras de la exhibición que estaban ofreciendo sus rivales. Leo Fiebich y Vega Gimeno se unieron a la fiesta con sus triples y pondrían la mayor ventaja en el luminoso (34-12). Un Araski aturdido y superado en todas las facetas, aprovechó el leve bajón de sus rivales para recortar distancias con dos triples antes del descanso (34-18).
SEGUNDA PARTE
Tras el descanso, el equipo vitoriano salió con otra actitud y era superior con mucha facilidad. Los despistes del Casademont le favorecían, y poco a poco, disminuía la renta (37-29). Carlos Cantero, obligado a pedir tiempo muerto tras el mal momento que estaban pasando sus jugadoras, logró que reaccionarán. Leo Fiebich, al rescate, daría oxígeno con su triple. El mejor Casademont reapareció, y no dio opción al Araski, que falló en los siguientes ataques. El buen momento de Gatling contagió a las suyas para volver a la exhibición de los primeros minutos, logrando un cómodo colchón sobre sus rivales para llegar al último cuarto (53-33).
En el último cuarto crucial, el Araski no se dio por vencido a pesar de la distancia en el marcador. El buen talante de las vascas no fue suficiente ante la superioridad de las rojillas que seguían a lo suyo. El Casademont femenino continuaba siendo un muro imposible de derribar. Entre el fervor de la Marea Roja, Vega Gimeno anotó el triple decisivo a los dos minutos de concluir el encuentro, que les pondría pie y medio en semifinales. La canterana Leire Urdiain se quiso unir a la fiesta con su tiro de tres y cerró el resultado con un 71-50 para que Casademont siga soñando en la competición copera.
