Hace ya tiempo, un sitio tan emblemático en nuestra ciudad de Zaragoza como es la Plaza de la Seo viene siendo objeto de un vandalismo “tolerado” por nuestro Consistorio.
Nos referimos, cómo no, a esos grupos de jóvenes que se reúnen diariamente con sus monopatines en la citada Plaza y que se dedican hasta altas horas de la madrugada a realizar sus acrobacias, deteriorando gravemente tanto el mobiliario urbano, como el pavimento y escalones que adornan nuestra Plaza y que; por qué no decirlo, realza el esplendor de los monumentos que la circundan.
Basta con echar un ligero vistazo al pavimento, para darse cuenta del destrozo que estos jóvenes (y no tan jóvenes), ya le han causado a nuestra Plaza de la Seo, ante la pasividad manifiesta de un Ayuntamiento que se encuentra al lado y no toma medidas para erradicar estos actos, que no solo deterioran gravemente la imagen de nuestra ciudad, si no que las emisiones acústicas generadas por estos “skaters” ó (monopatineros) hasta altas horas de la noche con los golpes producidos por sus “tablas”, no debe ser del agrado de los vecinos y transeúntes de la zona.
Mientras, “de ciento a viento”, como si de un premio de consolación se tratase, se persona alguna patrulla de la Policía Local con sus luces y estacionando bien visibles, para que a estos jóvenes les dé tiempo a cesar en sus actividades y sentarse en los escalones con sus monopatines en la mano, hasta que los agentes se marchan a los 10 minutos y vuelta a empezar.
¿Vamos a continuar así hasta que la ciudad tenga que hacer frente al coste de la reparación de estos desperfectos (que por otra parte ya han sido ocasionados, ya que el embaldosado está lleno de roturas), o los responsables del Ayuntamiento de Zaragoza van a tomar alguna medida (de tipo: señalización vertical, informando sobre la prohibición de estas actividades, personándose con más presencia policial hasta que se erradique dicha costumbre)?, ¿hasta cuándo señor alcalde?
Lo triste de todo esto es que estos ojos han presenciado en varias ocasiones cómo se pasean dichos jóvenes sobre sus monopatines delante del Agente de Policía Local destacado en la puerta del mismo Ayuntamiento sin ningún pudor, ni consecuencia…
Sergio Vallespín Urbeltz