Zaragoza y su área de influencia encaran este lunes su quinto día de retorno a esa Fase 2 “flexibilizada”, que llegaba acompañada de una orden que imponía, de nuevo, la limitación de aforos en establecimientos y que obligaba a toda persona mayor de seis años a hacer uso de la mascarilla. Una obligación que, de quebrantarse, traería consigo también una sanción económica. Sin embargo, la medida no ha impedido que algunos ciudadanos siguiesen dando rienda suelta a la imprudencia. La Policía Local, de hecho, ha podido contabilizar casi 700 denuncias por algún tipo de incumplimiento estos días.
Así, desde el pasado 15 de julio, fecha en la que se oficializaron las nuevas restricciones a través de su publicación en el BOA, se han efectuado hasta 630 denuncias individuales por la no utilización de la mascarilla. Un uso que debe hacerse, tal y como indica la propia norma, tanto en espacios abiertos como cerrados, e independientemente del distanciamiento social.
Por otro lado, la Policía ha contabilizado un total de 32 advertencias por botellones en plena vía pública. Han sido decenas los jóvenes que estos días han ejercido doblemente la irresponsabilidad, llegando a juntarse multitudinariamente con amigos para ingerir alcohol en ausencia de la mascarilla.
También se han registrado indecencias en el ámbito de la hostelería. Hasta 16 denuncias en establecimientos públicos que excedieron el aforo permitido, o habilitaron su espacio careciendo de licencia. A este incumplimiento se sumaron otras nueve denuncias provenientes de terrazas o veladores que asimismo sobrepasaron su capacidad.
