El consejero de Industria, Competitividad y Desarrollo Empresarial y vicepresidente del Gobierno de Aragón, Arturo Aliaga, ha lamentado la “psicosis” que está afectando al turismo aragonés, lastrado por las cancelaciones tras la propagación de los últimos brotes de coronavirus. Unos brotes que, ha recordado, no afectan a muchas zonas turísticas de la Comunidad como el Pirineo, que sigue dentro de la nueva normalidad.
“Esa psicosis general nos está perjudicando”, ha lamentado Aliaga, quien ha puesto como ejemplo también zonas como Teruel, donde sus hoteles deberían estar en torno al 70% de ocupación por estas fechas y apenas alcanzan el 10%. Una crisis turística que el vicepresidente y consejero ha achacado al mensaje que se está trasladando a nivel nacional por parte de algunos medios de comunicación.
Así, Aliaga ha recordado noticias como el sacrificio de más de 90.000 visones en Teruel, la intervención del Ejército en Huesca o el retroceso de Zaragoza capital a Fase 2. “Si yo soy un ciudadano que llega a casa y ve estas tres noticias… Me desoriento”, ha lamentado.
Por ello, el vicepresidente ha llamado a seguir “una máxima”, los datos de contagios y las zonas más afectadas. En cualquier caso, y por encima de todo, Aliaga ha señalado la necesidad de cumplir “a rajatabla” las recomendaciones sanitarias, animando a viajar si estas se lo permiten y apelando a la responsabilidad personal.
No criminalizar a un sector hostelero que “está haciendo las cosas bien”
Arturo Aliaga ha valorado también el regreso a la Fase 2 sin flexibilizar de algunas zonas de la Comunidad como la ciudad de Zaragoza. Con medidas más restrictivas y la obligatoriedad de cerrar a medianoche, el vicepresidente ha reconocido que este regreso “afecta” al sector, para el que ha pedido respeto y que no se le criminalice.
“Cuando volvamos a la normalidad tenemos que aplaudir a un sector hostelero que ha hecho un gran esfuerzo”, ha indicado Aliaga, poniendo en valor las medidas de seguridad que están implementando para poder seguir abiertos y ser seguros. Así, la propagación del virus en estos espacios, ha defendido el vicepresidente, es más propia de “imprudencias” e “irresponsabilidades individuales”.
