"La Bruma": El miedo a lo desconocido

El cine contemporáneo francés abarca dentro de sus enormes dimensiones todos los géneros habidos y por haber. Prueba de ello y dejando de lado los más comunes últimamente -aquellas que suelen cabalgar entre la comedia inocente o el drama de época- nos llega a España el cuarto largometraje del canadiense Daniel Roby (primero en estrenarse en nuestro país) ‘La bruma‘, una coproducción franco canadiense protagonizada por Romain Duris (polivalente actor francés recientemente visto en ‘Todo el dinero del mundo’ tras aparecer en uno de los trabajos de Ozon) y la francamente irregular Olga Kurylenko que, adaptando el guión de Guillaume Lemans (Guionista habitual de Yann Gozlan -El hombre perfecto- , Jimmy Bemon y Mathieu Delozier, nos presenta un drama de ciencia ficción con esencia apocalíptica.

El film nos narra a groso modo cómo una densa y tóxica bruma aparece repentinamente en París tras unos temblores tectónicos. A pesar de centrarse en la capital gala el desarrollo de la historia dejará patente que no estamos ante un evento autóctono o puntual sino que se trata de algo de carácter más general y, sin dar muchas explicaciones, convertirá nuestro trío protagonista en un núcleo familiar en máximo riesgo, dentro de las ya de por sí excepcionales condiciones que presentan (su única hija reside en una gran burbuja/cápsula donde se protege tras desarrollar una rara enfermedad).

El guión escrito a la limón por los tres autores antes mencionados me gusta particularmente. Y me gusto por el toque minimalista que presenta a pesar de tener material para volverse mucho más difuso y querer abarcar más de la cuenta. La historia realmente se presenta y nos sacude pero no divaga. Va al grano dentro de la duda y las pocas explicaciones que se nos dan. Roby ha querido centrarse casi en exclusividad -apenas unos personajes secundarios darán más cuerpo al film- de la familia disfuncional expuesta y jugar con el contraste de la joven que no soporta el aire de fuera y unos adultos que no soportan el aire de la bruma. Una lucha por la superviviencia donde tendrán cabida escenas de tensión e incluso acción -poca- y donde podremos disfrutar visualmente con unas potentes escenas de París cubierta casi en su totalidad de esta misteriosa bruma.

El film entretiene de sobras y resulta ameno y muy disfrutable. Los actores está todos más que correctos, sobre todo Romain Duris, y el desenlace de la historia dejará una fábula curiosa sobre la evolución y las nuevas generaciones. Así pues, un film de género llegado desde Francia que destaca por su historia y su incertidumbre, todo ello a pesar de no querer tirar la puerta en ningún momento o de presentar alguna secuenciCa más o menos increible.

Recomendable.

LO MEJOR: El guión y Romain Duris.

LO PEOR: Le faltaría dar un puñetazo encima de la mesa para ser más impactante.

VALORACIÓN:

Banda sonora: 6

Fotografía: 6,7

Interpretaciones: 6,5

Guión: 6,8

Dirección: 6,5

Satisfacción: 6,5

NOTA FINAL: 6,5