La carrera como director de Peter Segal no es que brille especialmente por la calidad de sus films (‘Agárralo como puedas 33 1/3’, ‘El clan de los rompehuesos’, ‘Superagente 86, la película’…), algo por lo que tampoco será recordada la figura de Jennifer López al menos en lo que al séptimo arte hace referencia y a pesar de tener otras facultades, como por ejemplo poseer un gran carisma (portado desde su faceta musical) o su atractivo físico como argumento –eso sí– de poco peso en mero sentido cinematográfico.
‘Jefa por accidente’ es el nuevo juguete de lucimiento personal pagado por la propia Jennifer López (mejor que el último bochorno protagonizado por la latina) con el que intenta volver a explotar su faceta interpretativa pero que nuevamente cae presa de unos guiones tan livianos y edulcorados que se convierten en material casi exclusivo para fans de la cantante o para espectadores sin pretensiones que deseen pasar un rato con alguna sonrisa por en medio.
En esta ocasión Jennifer López se pone en la piel de Maya Davilla, una mujer inteligente que lleva toda la vida trabajando con diligencia para una empresa de supermercados y para la que aspira a conseguir un puesto de dirección dada su experiencia y capacitación. Maya, con pareja estable pero con miedo para dar el paso de la maternidad, no es tenida en cuenta para el puesto dado su carencia curricular laboral, haciendo de menos la basta experiencia y su alto desempeño en favor de los estudios previos. Ante la crisis que provoca esto, sus personas cercanas le falsean el currículum y es contratada como alto cargo en una empresa de cosméticos –campo que domina tras su experiencia en la tienda– donde coincidirá y competirá por un producto para la piel lo más biológico posible.
La película se ve con comodidad no resultando insultante para el espectador y trata de aprovechar la amistad real con la actriz Leah Remini (a quién recordaremos de joven en ‘Cheers’) para aportar pequeños sketches de gran complicidad entra ambas. Además, en un tono edulcorado y familiar, la película defiende un discurso en favor de lo biológico por encima de lo químico en el cuidado corporal así como –aquí viene lo más importante– la defensa de la capacitación laboral a través de la experiencia frente a la previsible capacitación a través de la base formativa y curricular.
En el reparto de la película, además de López y Remini, encontramos a varios intérpretes de segunda fila como la ex High School Musical Vanessa Hudgens, al veterano venido a menos Treat Williams (actor que comenzó en los años 70 y que vimos trabajando para grandes maestros como Milos Forman, John Sturges, Spielberg o el grandísimo Sidney Lumet), Annaleigh Ashfordo a Milo Ventimiglia, a quién hemos visto recientemente en ‘Creed II’ interpretando al hijo de Rocky o al que le vimos saltar a la fama por la serie de tv ‘Heroes’.
En definitiva una película deficiente en lo técnico, donde se ven claramente la discontinuidad de las secuencias y el recurso de la música como cohesión insuficiente, pero que se perdona por su mensaje optimista que trata entorno a la adopción y las posibilidades laborales de quienes no han tenido la suerte de poder desarrollar carreras profesionales.
TEXTO: Alfonso Asín.
LO MEJOR: Consigue alguna sonrisa. Cierto mensaje a pesar de lo liviano.
LO PEOR: Se aprecia que todo es extraordinariamente impostado. Parece en ocasiones un desfile de moda de la actriz.
VALORACIÓN:
Banda sonora: 6
Fotografía: 5
Interpretaciones: 5
Dirección: 5
Guión: 4
Satisfacción: 5
NOTA FINAL: 5