El escritor Alberto Jodra ha presentado este jueves su segunda novela “Sombras que pasan”, una narración detectivesca que pretende resaltar los efectos perniciosos de la soledad y las obsesiones. Galardonada con el XXIX Premio de Narrativa Santa Isabel de Aragón reina de Portugal, que entrega la Diputación de Zaragoza, el relato se disfraza de un carácter detectivesco con cierto aroma de parodia.
La obra, ha indicado Jodra, está narrada desde el punto de vista de un aprendiz de investigador privado que le presenta a su examinador el ejercicio de graduación para ser detective con un “sustrato filosófico que remite al mito de la caverna de Platón”, ya que ilustra al lector cómo su realidad no son más que meras sombras.
“Es una apuesta muy clara que hace este equipo de gobierno de la DPZ por instar, visibilizar y mantener el talento de los autores de nuestra tierra”, ha afirmado la diputada provincial por Zaragoza, Rosa Cihuelo, quien ha señalado que estos premios abren las puertas a multitud de escritores aragoneses y “les permite ser constantes en una profesión tan absolutamente ingrata a veces”.
La novela fue escrita, según ha explicado el autor, en apenas tres o cuatro meses, en una época de bloqueo mientras trabajaba en su primer libro, “El aroma de la pólvora”, que también fue galardonado en 2013 con el Premio Tiflos. Todo comenzó al ver la noticia de una persona fallecida sola en su casa, cuyo cadáver no se había encontrado hasta que el olor alertó a los vecinos.
En consecuencia, el jurado nombrado por la DPZ le otorgó el galardón a la par que destacó la calidad narrativa, de estructura y de ritmo de “Sombras que pasan”, puesto que, afirman, consigue dosificar la tensión a lo largo de la novela.
Jodra se ha mostrado risueño por el galardón y ha confirmado que se encuentra trabajando en una tercera novela que estrenará “esta primavera si todo va bien durante el invierno y estoy inspirado”.
