Llega el cortometraje “Vidas Apiladas”, una historia de casualidades y desconocidos

Los actores Alba Gallego y Jacobo Castanera, protagonistas de esta relación
photo_camera Los actores Alba Gallego y Jacobo Castanera, protagonistas de esta relación

Si sumamos dos desconocidos y una casualidad, la historia resultante se llama “Vidas Apiladas”. Se trata del primer cortometraje de la periodista zaragozana Laura Hevia, una historia que busca obligar al espectador a detenerse y fijarse en aquello que tiene más cerca para redescubrirlo y ponerlo en valor. “Vidas Apiladas nace de un pensamiento fugaz, de la necesidad de ser conscientes de que compartimos espacio y vida con cientos -¡miles!- de personas y que no reparamos en ellas. Cualquiera puede aportar algo especial. Hemos dejado de verlos, pero están justo ahí”, explica Hevia.

Le ponen rostro a esta historia los actores aragoneses Jacobo Castanera y Alba Gallego. Ellos serán los primeros en darse cuenta de lo importante que es darle una oportunidad a quien aparece por azar. “Son maravillosos. Han sabido encontrar el punto perfecto para cada personaje. Han sabido encontrarse a la perfección”, cuenta la zaragozana.

Con “confianza plena” en el equipo, afirma Hevia, “el proceso ha sido mucho más llevadero”. “Me lancé a dirigir esta historia con vértigo y mucho respeto. No es nada fácil ponerse detrás de la cámara. Yo soy contadora de historias y puedo flaquear en algún momento en la parte más técnica. Por eso, me he rodeado de un equipo técnico extraordinario”, explica la periodista.

El rodaje ya ha empezado en la capital aragonesa, pero se extenderá próximamente por otros pueblos de la provincia como Alagón o Torres de Berrellén

Hevia cuenta con el también realizador zaragozano Javier Gimeno (como productor y ayudante de dirección), Eduardo García (director de fotografía), Diego López (gaffer), Lucía Martínez (maquillaje), Daniel Caudevilla (arte y vestuario) y José Luis Crespo (sonido). Además, hay que sumar la colaboración del grupo de música local Ziro, quien se hará cargo de la banda sonora, y la Universidad San Jorge, colaboradora en la producción mediante el préstamo de material.

El rodaje ya ha empezado en la capital aragonesa, pero se extenderá próximamente por otros pueblos de la provincia como Alagón (de dónde es natural la directora) o Torres de Berrellén.