Hay textos que sobreviven a la vigencia del tiempo y que siempre aciertan con las necesidades de las personas. Textos que, por mucho que pase o por poco que se tenga en común con su autor, saben adivinar lo que se siente, lo que se vive y lo que se padece. Los llaman clásicos, por no decirles imprescindibles.
Esos textos, que cambiaron a generaciones pasadas y transformarán a generaciones futuras, llegan el próximo 28 de junio al Teatro de las Esquinas con la segunda edición de Delicias Clásicas, un pequeño festival que quiere acercar estos relatos tan conocidos al público zaragozano, haciendo un especial hincapié a los más jóvenes.
Manteniendo la humildad del pequeño proyecto, este ciclo cultural sigue apostando por renovar la oferta teatral de Zaragoza y por generar un nuevo público, aparte de dinamizar su propio barrio. Cuatro funciones para todos los públicos que vienen acompañadas por varias clases magistrales, ofrecidas por los actores participantes, en las que interactuar con alumnos y aficionados a las artes escénicas.
Cuatro clásicos actualizados al siglo XXI
La compañía Cascai Teatre será la encargada de abrir el ciclo con “Un tal Shakespeare”, una divertida comedia que bucea en todos los personajes del genial dramaturgo británico. Una oportunidad para conocer, en el presente, a unos personajes que siguen sufriendo sus tragedias, traiciones, muertes y dramas.
De un clásico de la literatura británica se pasa a uno de los personajes más reconocibles de las letras españolas. Lázaro de Tormes vuelve a la vida de la mano de Leamok Teatroa y a ritmo de rap, ya que Roberto Royo hace de la vida del pícaro más famoso de todos los tiempos una canción de violencia, droga y enfrentamiento con sus amos.
Cierran el ciclo “Conquistadores”, de Proyecto Cultura, que recupera la historia de algunos de los personajes más importantes de la historia nacional. También vuelve “El perro del hortelano”, un clásico de Lope de Vega que se actualiza con dramaturgia de Paco Mir.
Un festival asentados para todos los veranos
Delicias Clásicas quiere conseguir que Zaragoza, como muchas otras ciudades españolas, tenga un festival de teatro clásico en verano y de cierto renombre. Una apuesta ambiciosa que no olvida “la parte renovada y lúdica que damos a este arte”, tal y como ha señalado Alfonso Plo, el director del ciclo.
El presidente de la Junta de Distrito de Delicias, Alfonso Gómez, ha señalado que la intención del festival es “moverse hacia otros barrios” y que su nivel artístico es “muy alto, demostrando que el humor también lo tiene”. Una línea compartida con la vicealcaldesa Sara Fernández, que ha celebrado la buena salud del ciclo y que sea capaz de “acercar la cultura a todos los distritos de la ciudad”. “Es importante crear nuevos públicos que disfruten del teatro y que los jóvenes se acerquen a los clásicos”, ha finalizado Fernández.
