Las risas de unos inocentes pequeños quedaron totalmente apagadas por el sonido de una incesante sirena. Una explosión que, en apenas décimas de segundos, transformó sus felices rostros en tristes criaturas que vagan por el mundo sin comprender nada. Unos niños que disfrutaban de la rutina cotidiana de cuidar de sus muñecas, de la noche a la mañana, van a tener que aprender a cuidar de sí mismos. Sueños, ambiciones y vidas rotas en el tiempo que dura un pestañeo. Ya no queda nada, solo un silencio sepulcral que de vez en cuando se ve alterado por una espeluznante alarma que avisa de un nuevo bombardeo pero ya no queda nadie a quién alertar, solo escombros. Los afortunados siguen todavía buscando su lugar, un atisbo de luz al que aferrarse, aunque muchos ni tan siquiera han tenido la oportunidad de vivir para contarlo. Los lloros, la desesperación y la muerte es ahora la infernal orquesta que acompaña a un pueblo ucraniano que un día conoció lo que era la paz.
De manera literal, piedra por piedra, la ONG Global Humanitaria, con el apoyo de la Embajada de Ucrania y del Programa Estación Abierta Adif, ha inaugurado la exposición “Piedra a Piedra”, una muestra que tiene por objetivo sensibilizar a la ciudadanía sobre cómo afecta la guerra de Ucrania en la educación y la infancia que aún permanece en el país. “Piedra a Piedra”, así está construida una exposición compuesta por materiales de la escuela Pinocho de Borodyanka, una población de unos 13.000 habitantes, situada a 50 kilómetros de Kiev. Esta localidad fue objeto de un bombardeo el 1 de marzo de 2022, que destruyó grandes edificios residenciales y causó graves daños en el centro educativo.
La exposición se podrá disfrutar en el vestíbulo de acceso a las vías 6 y 7 de la estación Delicias durante dos semanas, hasta el próximo 1 de mayo. En la muestra se recrea una de las aulas del centro, lo que permite al visitante sumergirse en un escenario arrasado por el conflicto, entre escombros y elementos escolares recogidos por un equipo de Global Humanitaria durante una de sus intervenciones de ayuda humanitaria en el país.
El encargado de conducir el acto de presentación de esta exposición ha sido el actor y presentador Luis Larrodera, quien aseguraba que se trata de “una exposición de las que pellizca”. “Esto que tenemos aquí detrás es un trocito de la realidad que se está viviendo a unos 3.000 kilómetros de aquí. Hoy es el día 419 de conflicto bélico en Ucrania. El ser humano tiende a normalizarlo todo y eso no significa que las cosas desaparezcan. A pocos kilómetros de aquí todavía se escuchan los bombardeos, los disparos y hay una población que se ve afectada. La situación que se está viviendo allí es de un conflicto bélico diario”, continuaba Larrodera con su discurso.
La muestra enseña la cara menos humana del ser humano y los módulos expositivos sumergen a los visitantes en el interior de la clase y les sitúan, con la ayuda de unos paneles informativos con imágenes, vídeos y datos, dentro de una realidad que a día de hoy sigue ocurriendo. En el momento en el que se ataca a una escuela, se atenta contra las personas más frágiles en cualquier conflicto, en los niños, y, de esta manera, se están destruyendo esos espacios seguros en los que transcurre la infancia.
Además, a la presentación del acto ha acudido el consejero de Acción Social y Familia, Ángel Loren, quien recordaba que “Zaragoza es una ciudad solidaria” y que fue la capital aragonesa “la primera ciudad de España que puso a disposición de la situación de crisis humanitaria en Ucrania viviendas para que pudiesen ser acogidos”, alardeaba el consejero con orgullo.
El responsable de comunicación de Global Humanitaria, Juanjo Leamberri, también ha intervenido durante la inauguración y ha aprovechado para contar cómo después de haber visitado Ucrania con cierta frecuencia “se nos ocurrió recoger estos objetos y traer este pedacito de esta cruda realidad a España para que nos hagamos una idea de cómo la guerra afecta a la educación”.
GUERRA EN UCRANIA
La guerra en Ucrania ha supuesto la crisis humanitaria más grave de Europa desde el fin de la Segunda Guerra Mundial. Se estiman en más de 240.000 el número de víctimas. Y más de 8 millones de personas han tenido que huir de su país. Desde el inicio de los ataques, alrededor de 2.719 centros educativos han sido totalmente destruidos. Por otro lado, se estima que 5,7 millones de niños y niñas en edad escolar se han visto afectados desde el inicio de la guerra, pero el alargamiento del conflicto parece diluir el impacto de su realidad.
La guerra tiene una importante afectación económica y el acceso a alimentos empeora a medida que las personas deben desplazarse dejando sus casas, sus tierras, sus trabajos y, en muchas ocasiones, sus familias. Según datos del Programa Mundial de Alimentos de la ONU, uno de cada tres hogares en el país sufre inseguridad alimentaria.
GLOBAL HUMANITARIA
Global Humanitaria es una organización no gubernamental con más de 20 años de experiencia en Cooperación Internacional al Desarrollo que presta especial atención a la infancia, trabajando para garantizar los derechos de los niños y niñas.
Mediante proyectos de Ayuda Humanitaria trabajan con población víctima de crisis humanitaria, conflictos armados y desastre naturales, en situación de desplazamiento forzoso o refugiados, con el objetivo de ayudarles a superar el periodo crítico, a restablecer sus derechos y garantizar su protección. Estas acciones Humanitarias se centran en ofrecer una respuesta de emergencia enfocada en facilitar a las víctimas el acceso a alimentos, agua, higiene, salud, refugio y educación básica.
