La artista Martta García refleja una “sociedad de invisibles” en su última exposición en Zaragoza

Martta García presenta su exposición "Realidades Invisibles" en el palacio Montemuzo.
photo_camera Martta García presenta su exposición "Realidades Invisibles" en el palacio Montemuzo.

Dicen que una imagen vale más que mil palabras, pero como casi todo, siempre hay una excepción que confirma la regla. Para una cultura tan visual como la actual, capturar el momento y aparecer en una foto se puede convertir casi en una necesidad imperiosa. El mundo de ahora premia más la imagen que se proyecta que lo que realmente hay dentro de cada uno. Es por ello que las personas se han convertido en coleccionistas de instantes, pero lo cierto es que la humanidad se está volviendo prácticamente invisible.

La artista zaragozana Martta García Ramo ha presentado esta mañana, en el emblemático Palacio de Montemuzo, la exposición “Realidad invisible”. Se podrá disfrutar desde hoy hasta el próximo 9 de julio y se trata de toda una reflexión sobre la sociedad actual y la manera de interactuar de las personas.

A la presentación ha acudido la jefa de Cultura del Ayuntamiento de Zaragoza, Romana Erice, así como la vicealcaldesa y Consejera de Cultura y Proyección Exterior, Sara Fernández, quien ha alabado el trabajo de la artista asegurando que “es una obra en la que nos podemos sentir inspirados todos”. “Se trata de una obra plásticamente preciosa que además invita a reflexionar en una sociedad con un ritmo de vida frenético donde preferimos ver gente a través de las pantallas. Hay que reivindicar ese contacto humano”, ha concluido la vicealcaldesa.

“Estamos sustituyendo la conversación por la imagen y el emoticono. La reflexión por la inmediatez y estamos dejando la comunicación en manos de un solo sentido”, explicaba García. Aunque la actualidad está saturada de imágenes, lo cierto es que la realidad llega de manera fragmentada y distorsionada a una sociedad en la que sobran imágenes y faltan relatos.

La artista saca la inspiración de las fotografías que toma en sus viajes, especialmente de Japón, Alemania e Italia y como ella misma asegura, “pinto óleo sobre lienzo y lo primero si tuviera que definir las etapas de creación es elegir la imagen y el encuadre ya que de una misma imagen puedo obtener distintas obras dependiendo del que elija”.

Uno de los elementos que más llama la atención son esos personajes en blanco a los que la artista no ha querido dar vida como un reflejo de esa invisibilidad. De esta forma invita al espectador a reflexionar sobre cuál es su realidad y a que les de una segunda oportunidad a los invisibles, esas personas que se cruzan en algún momento del día en el camino pero que, absortos en una realidad paralela tecnológica, cada vez se pierde esa sutil arte de mirar a las personas que pasan a un lado. La propia creadora lo resume diciendo que “la imagen queda terminada sin necesidad de que esté dibujada”.

La obra de Martta profundiza en “la subjetividad de lo que creemos ver” y en cómo se interpreta la realidad en base a las experiencias y vivencias propias. En la mayoría de ocasiones no son los ojos los que miran, sino la mente, percibiendo el mundo desde puntos de vista individuales y no de cómo se muestran realmente.

A la hora de elaborar sus llamativos cuadros sigue un método riguroso en la composición y de cada uno de los personajes se va imaginando cuál sería su historia: “Me gusta pintar lo que me va provocando conforme la obra me va sugiriendo y ese primer personaje me marca la senda de los secundarios y eso me genera una inquietud de cómo acabará la obra. Me resulta un reto, pero también a la vez buscas la composición y el equilibrio de la obra”.

Con el elemento de los pasos de cebra, crea el reflejo perfecto de una sociedad en la que cada uno toma su camino y en la que tal y como explica la propia artista, “todos somos invisibles”. Con su obra, Martta García crea lugares que recuperan y multiplican la presencia de los olvidados, con el objetivo de hacer visibles a los invisibles y de educar la mirada hacia esos “otros”.

MARTTA GARCÍA RAMO

Martta García Ramo es una apasionante pintora española, nacida en Zaragoza, con exposición nacional. Ella usa el arte como una herramienta para cuestionar las formas de reaccionar ante el mundo, explorando temas como el poder, las personas y la realidad. Principalmente inspirada en las fotografías que toma ella misma, compone pinturas de multitudes que parecen caóticas y estructuradas a la vez.