Juntar a Camarón con Bruce Lee: el "cantaor" que hace flamenco en chino desde Zaragoza

El Tumbaíto
photo_camera Es el único artista internacional en hacer flamenco en chino

Creció escuchando el "Soy gitano" de Camarón a todo volumen al tiempo que la "Operación dragón" o el "Juego de la muerte" de Bruce Lee se reproducían una y otra vez en la televisión de su casa en Zaragoza. Hasta la capital aragonesa se mudó Alejandro Sánchez desde su Tarragona natal cuando solo tenía tres años. Y entonces empezó a cantar. Entre palos flamencos y los palos literales de Bruce Lee, acabó cantando el "Volaré", en la versión de los Gipsy Kings, en Las Ventas rodeado de bailarinas. Una versión más de la icónica canción si no fuera porque esta estaba en chino. Y así fue como el "Tumbaíto", al que el apodo le viene desde la cuna, comenzó a convertirse en referente mezclando dos culturas, que, a priori, no tenían nada que ver.

Lo hizo no sin dificultades y es que entre todos los idiomas del mundo, Tumbaíto fue a escoger uno de los más complicados. Ya no solo por lo que supone aprenderlo sino por la entonación adaptada a las canciones de flamenco, pues el "quejío" todavía no ha llegado hasta el país oriental. De hecho, cuando grabó esa versión del "Volaré" de los Gipsy Kings en China no lo entendieron.

"Mandamos una primera versión de la canción a China y nos la devolvieron porque decían que solo se entendía el estribillo y al gigante asiático solo podíamos entrar si éramos políticamente correctos. En China tienen cuatro acentuaciones y seis vocales y dependiendo de en qué silaba pongas el acento significa una cosa u otra. Así que imagínate el esfuerzo que supuso grabar por tercera vez el tema después de tener el videoclip ya prácticamente listo", cuenta el Tumbaíto.

Lo de hacer flamenco en chino surgió tras un chasco profesional con un disco que el Tumbaíto grabó en Jerez de la Frontera y que "se quedó en un cajón". Después, en un domingo de comida familiar salió la idea de dar el salto internacional. "Pensamos en hacer flamenco en árabe, en ruso, en turco…", comenta el "cantaor". Finalmente se decantaron por el mandarín debido a la pasión que siempre le ha despertado China. "En Japón llevan años de ventaja en este tema, de hecho ha habido extriunfitos que han traducido canciones al japonés pero en China todavía no", relata.

De hecho, asegura ser el único arista a nivel internacional en hacer flamenco en chino. Y no solo flamenco y es que a base de estudiar religiosamente el idioma, el "cantaor" se anima ahora también a hacer una versión del "My way" de Frank Sinatra. "Tengo la letra ya traducida y solo falta que nos den los permisos ya que hay que hacer trámites burocráticos y está todo el tema de los derechos y los royalties que vienen desde Estados Unidos", explica. De momento, también sigue trabajando en la capital aragonesa haciendo shows en castellano en diferentes lugares a la espera de esa conquista del gigante asiático.