Lo ha vuelto a conseguir. El Festival Iberoamericano de Cultura Musical Vive Latino ha vuelto a hacer vibrar a las más de 44.000 personas que no se quisieron perder la celebración de su segunda edición en España. De nuevo, el recinto de la Expo de Zaragoza fue el lugar escogido por su promotor, Nacho Royo, para dar vida a hasta 39 conciertos en un evento único que se ha posicionado como uno de los grandes festivales ya no solo a nivel nacional, sino europeo.
Con artistas como Andrés Calamaro, Julieta Venegas, Juanes o Loquillo entre los más aclamados, sus dos días de programación han vuelto a ser únicos para un público llegado desde todas las partes del mundo. La alcaldesa de la capital aragonesa, Natalia Chueca, ha felicitado a los implicados en el desarrollo de esta nueva cita que la convierten en “un ejemplo”.
De nuevo, la ciudad se había adaptado para recibir un acontecimiento de estas características. Aunque no será el único. El anuncio del concierto de Bunbury en La Romareda es una clara muestra de ello. En este sentido, la movilidad urbana, organizada con refuerzos para evitar las aglomeraciones, ha notado un considerable aumento, especialmente el Tranvía de Zaragoza, con un 50% más de usos que el año pasado.
PUNTO VIOLETA
Otro de los ejemplos destacados según Chueca ha sido el punto violeta. “Quiero felicitar a todo el equipo porque no se ha producido ningún incidente de agresión o abuso sexual que a veces pueden enturbiar este tipo de eventos. Los zaragozanos han estado a la altura, han disfrutado, pero de una forma pacífica como sabemos hacer las cosas aquí”, ha apuntado.