
Shinji Kagawa es la mayor atracción del zaragocismo. El futbolista nipón ha sido presentado este martes ante cerca de 7.000 personas entregadas en el estadio municipal de La Romareda. Y nada ha tenido que ver con el resto que se han producido a lo largo del verano. Bandas de música japonesas y otros aragoneses como b vocal han preparado un atractivo “mix” de culturas que han podido disfrutar los aficionados.
La presentación ha comenzado con la rueda de prensa, amenizada con el grupo de cultura japonesa en Zaragoza. Allí, Lalo Arantegui ha resaltado “el orgullo” de tener en el club un fichaje que “parecía imposible” pero que “se ha hecho real”. El director deportivo del club ha hecho mención a su palmarés, en el que se encuentran títulos como una Copa de Asia o dos Bundesligas alemanas.
Por su parte, Sinji Kagawa ha destacado en numerosas ocasiones su felicidad por pertenecer al Real Zaragoza y la obligación del club por volver a Primera División. Además, no le preocupa en absoluto la presión. Más bien al revés. “En todos los equipos hay presión. Pero esta presión voy a disfrutarla y nos tiene que ayudar a subir a Primera División”, ha afirmado el japonés.
También ha reconocido que Ander Herrera le ha comentado la grandeza del club maño. “Igual está más ilusionado que yo”, ha mencionado en un claro tono humorístico. Además, ya está con la cabeza en “demostrarlo todo en el campo”. Tiene dos objetivos claros, primero ascender y después el mundial.
El zaragocismo está feliz con el nuevo fichaje. Cuando Shinji ha saltado al campo, más que una presentación parecía el primer partido de liga. Los aficionados han cantado, han gritado y han celebrado. Antes de que pisase el terreno de juego, han coreado su nombre. A continuación se ha entonado el “alé Zaragoza alé alé”. Y a lo largo de todo el acto se han sucedido los aplausos, los “olés” y la admiración por una superestrella que ya está preparada para jugar.
Después de los clásicos toques y las caminatas con el balón, se han producido las firmas de los balones que irían a parar a la grada. Los aficionados han luchado por hacerse con uno, pero solo unos pocos elegidos han podido atraparlos. La afición tenía ganas de más, y ahí es cuando ha entrado en escena b vocal. El grupo ha puesto la guinda a un acto muy trabajado por parte del club y con el que todos, aficionados y jugador, han disfrutado.
Sin embargo, el broche definitivo lo ha vuelto a poner la afición. Cuando parecía que todo había finalizado, 7.000 almas han vuelto a hacer de las suyas. “Volveremos a Primera, volveremos otra vez”, cantaban todas al unísono. Y así ha finalizado la presentación de la superestrella del Real Zaragoza. Con una comunión absoluta entre jugador y afición y con un único deseo: la vuelta a la élite. El camino comienza este sábado.