Ya llega el último partido de la fase de grupos de Basketball Champions League para el Casademont Zaragoza, donde lleva inmerso desde mediados de octubre. Será este martes, ante el Brindisi, equipo italiano que no se juega nada al estar matemáticamente eliminado. Los de Porfirio Fisac buscan un triunfo que les permita asegurarse el pase como primeros de grupo y no depender del Bonn ni del Dijon.
Después de acumular siete triunfos consecutivos, llevarse la victoria en Italia supondría dar la puntilla final para confirmar el liderato. Terminar la fase como primero de grupo garantiza contar con el factor campo y el factor cancha en las eliminatorias. De esta forma, ya en octavos, tiene la certeza de que su rival partirá con ese hándicap. Si vence y termina líder, le esperará un conjunto que haya finalizado cuarto.
El técnico zaragozano ya anunciado que se va ir terminando el sistema de rotaciones. “Estamos ya en modo salvaje”, ha sostenido en rueda de prensa. Lo cierto es que será “un partido complicado”, y será especialmente importante por tratarse del tercero “a nivel físico máximo”. La pelea por la primera plaza no será sencilla, ya que enfrente habrá un conjunto motivado por medirse al líder. De hecho, el coach ha recordado que en los partidos no se ve la clasificación, sino “un equipo contra otro”.
La fantástica reacción que han tenido los rojillos en este tramo final, superando al PAOK, Dijon, Neptunas, Falco, Besiktas, Bonn y Brindisi de forma consecutiva, le aúpan a lo más alto. Como es lógico, los zaragozanos han tenido que pasar un proceso de adaptación a la competición, ya que nunca la habían disputado. Esto les llevó a tener un comienzo algo dubitativo, pero han sabido disipar a la perfección esos interrogantes.
El próximo rival, el Brindisi italiano, les espera sin nada que jugarse. Actualmente ocupan la sexta posición del campeonato europeo, y tienen imposible alcanzar al Besiktas, que último equipo que se clasificaría. Sus cinco victorias en trece partidos han sido claramente insuficientes para llegar vivos a la última jornada, y ahora solo se centran la campaña regular. Ahí ocupan la sexta posición, y quieren superar la quinta plaza que obtuvieron la pasada campaña y que ahora ocupa el Vanoli con las mismas victorias.
Fisac ya mira de reojo los posibles rivales con los que se podría enfrentar en los octavos de final. La ronda comenzaría el próximo 3 de marzo, ya conociéndose todos los equipos que han superado la fase de grupos y con varios partidos por delante. Previamente, los maños tendrán que viajar a Málaga para disputar la Copa del Rey, que les enfrentará a Unicaja, anfitrión del torneo. Los enfrentamientos comenzarán el jueves 13 de febrero.
Sin embargo, el Casademont Zaragoza solo piensa en el partido de este martes, primera fecha clave para los rojillos. Después, les espera el Manresa en un enfrentamiento donde podrían adelantar al Barcelona si este no logra vencer ante el Gran Canaria en las islas. El ritmo frenético de competición no debe despistar a un equipo que continúa demostrando que su éxito no es casualidad.