El Real Zaragoza asienta su solidez defensiva

Atienza, en uno de los primeros partidos de Liga. Foto: Real Zaragoza/Tino Gil
photo_camera Atienza, en uno de los primeros partidos de Liga. Foto: Real Zaragoza/Tino Gil

En la Segunda División española poco se puede hacer si se realizan grandes concesiones atrás. Encajar muchos goles suele ser sinónimo de desastre, y los conjuntos experimentados saben que se debe empezar por atrás para la construcción del equipo. Y hasta ahora, el Real Zaragoza de Rubén Baraja está cumpliendo a la perfección.

Dos partidos con la puerta a cero es el saldo y dos goles encajados en el primer partido. Esos son los números en los que se mueve actualmente el cuadro maño. Además, los recibidos ante Las Palmas fueron disparos lejanos, algo que también habla bien a favor de la solidez aragonesa. De momento, están sabiendo echar el cerrojo.

Por otra parte, tanto en Alcorcón como ante el Albacete, el equipo dio sensación de seguridad. Atienza parece haber recuperado una buena versión de sí mismo y Guitián cumple con solvencia al lado del andaluz. Algo más de movimiento ha habido en los laterales: Vigaray dejó su sitio a Tejero tras lesionarse y Nieto se ha alternado con Chavarria. Eso sí, ninguno ha desentonado. En la portería, Cristian ha sido un seguro.

Es bueno que el Real Zaragoza se acostumbre a mantener registros de goles recibidos tan bajos. Aporta confianza a la retaguardia, y permite salir siempre al terreno de juego con una garantía que no existiría sin esas bases defensivas. Eso sí, el reto ahora es mantener esa línea, empezando por el encuentro ante el Málaga el próximo fin de semana.

LA ZONA OFENSIVA, UN PUNTO DE MEJORA

A pesar de que el conjunto maño ha demostrado que sabe defender, tiene que cuidar más la zona ofensiva. En sus últimos dos encuentros, a pesar de no haber encajado, únicamente ha sido capaz de anotar un tanto. Ha sido precisamente en el último partido, ante el Albacete, en el minuto 88. Fue Narváez el que aprovechó el centro de Nieto para poner el 1-0 definitivo.

Hay que recordar que, ante Las Palmas, a pesar de que se anotaron dos, uno fue en propia meta. Y ante el Alcorcón no se logró perforar la portería rival sobre el terreno de juego. El partido en casa ante el Málaga será otra historia diferente, porque cada batalla es un mundo. Eso sí, manteniendo la solidez atrás y mejorando la línea de ataque, el Real Zaragoza estará más cerca de llevarse los tres puntos que de perderlos.