Expertos en ciberseguridad desvelan a empresas de Aragón las claves para blindarse ante un ataque

La Cámara de Comercio ha acogido la jornada "Ciber Riesgo"
photo_camera La Cámara de Comercio ha acogido la jornada "Ciber Riesgo"

La ciberseguridad sigue siendo asignatura troncal pendiente para todos. Tras un especialmente agresivo 2019, donde se vivieron ataques masivos de datos a nivel mundial, resurge el debate acerca de la falta de preparación personal y empresarial en caso de sufrir un asalto. Precisamente, este jueves, la Cámara de Comercio de Zaragoza ha acogido una jornada sobre Ciber Riesgo, en la que expertos de distintos sectores han radiografiado el estado actual de la cuestión, planteando estrategias de blindaje y protección que contemplan incuestionables ante las nuevas y desconocidas amenazas. Sin embargo, alertan, nada podrá hacerse si la sociedad no se inculca a sí misma una noción esencial: la cultura preventiva.

La jornada ha sido organizada por Kalibo Correduría, según explica su director técnico, Óscar Sanz, porque en un mundo altamente tecnologizado y digitalizado como este “el mundo del seguro tiene un papel primordial en la gestión del riesgo de empresas y personas”, y, por ende, “en la protección de su patrimonio”. Un patrimonio que, de ahora en adelante, no va a moverse en otra dimensión que no sea “la del ciberespacio”, concluye.

Sin embargo, ese ciberespacio continúa siendo el gran desconocido, por todo lo que fusiona: mundo intangible e tangible. Una cuestión que genera “mucho miedo”, explica Sanz, en especial, por la falta de “experiencia histórica que tenemos” y por la “tremenda incertidumbre” que rodea todo lo que tiene que ver con ella. De hecho, matiza Sanz, lo que más asusta es “lo que está por venir”, explicándolo con una gráfica analogía: “En San Francisco están acostumbrados a los terremotos, pero allí suele decirse que al que denominan The Big One todavía no ha llegado”. Esto es, argumenta el director de Kalibo, más o menos “lo mismo que ocurre con las ciberamenazas”, pues aún no se ha sucedido el que será “el gran ataque que nos pondrá a todos patas arriba”.

Aun así, y haciendo alusión a que todo esto no es sino “el futuro”, vuelve a poner de relieve el origen del caos. La causa principal que imposibilita a empresas y usuarios a desenvolverse con todo lo que tiene que ver con el mundo “cyber”: el desconocimiento, la falta de experiencia. Por ello, recalca la importancia de la prevención. Una afirmación que asimismo comparte la analista de la compañía Hitcox, Pilar de Rábago, experta en la detección de riesgos empresariales.

Según Rábago, ese riesgo no deviene únicamente del ataque de un hacker, sino que hasta dos tercios de las fugas de seguridad provienen de “fallos, errores o despistes” de los propios empleados, por padecer deficiencia informativa, formativa o, simplemente, de concienciación. Algo que suele ocurrirles asimismo a las Pymes, apunta la experta, por la falsa creencia que tienen de que “por ser pequeñas, no van a ser un foco de atención para un ataque”. No obstante, no son conscientes de que son ellas las que esconden “la mayor brecha de seguridad”, y, por tanto, las que más probabilidades tienen de ser “atacadas”.

Aunque, en realidad, tal y como ha expuesto en su ponencia el ingeniero informático y experto en cibercrimen Fernando Conde, contar con una simple identidad digital en internet resulta ya de por sí peligroso. Máxime, al extenderse la tecnología a todas las ramas cotidianas de la vida, con los Smartphones o el Internet de las Cosas. Conde vaticina un 2020 todavía más peliagudo que el pasado 2019, que ha sido “un año récord” en cuanto a ataques masivos. No solo son las campañas de pishing las que “traen de cabeza a los investigadores”, sino que en los últimos meses se han vivido las mayores filtraciones de datos “de la historia”, y jamás antes se había llegado a declarar el Estado de Emergencia, como ocurrió en diciembre en Nueva Orleans.