El Gobierno de Aragón va a pelear “hasta el final” para que acoger la fábrica de baterías eléctricas por la que pelean todas las comunidades autónomas. Pese a las primeras informaciones que apuntaban a que iba a instalarse en Cataluña, la ministra de Industria, Reyes Maroto, trasladó al presidente Javier Lambán que la decisión todavía no estaba tomada, lo que ha “reavivado” su “ilusión” en este proyecto.
Así, el líder del Ejecutivo aragonés confía en los “sólidos fundamentos” de Aragón y en el trabajo llevado a cabo para traer esta fábrica, que supone una inversión de 5.000 millones de euros. “Hemos trabajado más que nadie. Hemos ido a Shanghai, nos hemos reunido con los empresarios chinos en Madrid, hemos recibido a fabricantes coreanos y chinos en el Pignatelli”, ha recordado Lambán, quien también ha mencionado la importancia de contar con un socio tecnológico más que con los “socios capitalistas como fabricantes de vehículos o Iberdrolas”.
Por ello, durante los últimos días se han vuelto a retomar las conversaciones con el sector para tratar de acoger esta factoría. “Seguimos trabajando en la línea que hemos mantenido siempre, tratando de reagrupar el interés y el ánimo del sector, del clúster de la automoción, de PSA, de CEOE… He hablado con todo el tejido productivo y representantes empresariales, y vamos a pelear hasta el final para que la decisión de la implantación nos favorezca”, ha concluido.
