El centro tecnológico Aitiip logra desarrollar materiales a partir de papel de periódico reciclado

Los paneles de insonorización son uno de los elementos que fabrican
photo_camera Los paneles de insonorización son uno de los elementos que fabrican

El proyecto europeo Ceplafib, en el que ha colaborado el centro tecnológico aragonés Aitiip, ha logrado desarrollar nuevos compuestos y materiales a partir de plásticos y papel de periódico ya usados, con los que han desarrollado tres prototipos de productos sostenibles para la industria de la construcción-edificación, del transporte de caravanas: embalajes protectores, bandejas, piezas de sujeción o paneles de insonorización. De esta manera, Ceplafib propone a la economía circular como solución transversal al problema medioambiental de la contaminación ocasionada por este tipo de residuos.

En el proyecto han participado centros tecnológicos, institutos públicos y empresas privadas de cuatro países europeos, entre los que se encuentra el centro tecnológico zaragozano Aitiip. Ceplafib está siendo coordinado por el centro tecnológico esloveno Tecos, al que se suman como socios la empresa de reciclaje de plástico Omaplast (Eslovenia), el fabricante de autocaravanas reconocido a nivel mundial Adria Mobil (Eslovenia), ITB (Polonia) y Ecopulp (Finlandia).

Casi la mitad de todas las piezas de plástico que se producen en el mundo tienen una vida útil de un solo uso. Estas se convierten en residuos, pero no dejan de ser un valioso recurso para ser aprovechado, por lo que el reciclaje de residuos plásticos se convierte en un factor determinante en el contexto de la economía sostenible que propone Ceplafib. En la actualidad, la concienciación sobre la necesidad de recuperar materiales va en aumento, porque, poco a poco, se van descubriendo más áreas de aplicación (envases, sobre todo), siendo las poliolefinas particularmente atractivas en las líneas de reciclaje.

Cada año se generan alrededor de 275 millones de toneladas de residuos plásticos en todo el mundo y solo se recicla el 9% de los residuos plásticos producidos. Alrededor del 12% se incinera, mientras que el 79% restante se acumula en vertederos o se abandona en la naturaleza. La alianza circular LIFE de Ceplafib plantea una alternativa sostenible para el uso de residuos de plástico y papel en materiales compuestos a medida, favoreciendo la economía circular en toda la cadena de valor del plástico.

Ceplafib ha desarrollado dos compuestos comercializables con una base de matriz de polipropileno o polietileno reciclado reforzada con fibras de papel de periódico. La primera se ideó para aplicaciones de moldeo por inyección y la segunda, para tecnologías de transformación por termoformado.

Estos compuestos Ceplafib han sido validados por los sectores de automoción, embalaje y construcción, y utilizados para desarrollar envases o coberturas protectoras para tuberías, piezas de sujección y protección para autocaravanas, paneles decorativos para fachadas y paredes de insonorización para la construcción.

Si los materiales desechados se recolectan por tipos, se pueden procesar fácilmente. Sin embargo, no suele ser el procedimiento habitual (especialmente en los residuos plásticos que generan los consumidores finales), porque, al final, todas las clases de plásticos terminan en centros de recogida, mezclados. Algo que, sin duda, se presenta como uno de los muchos retos que necesitan abordarse en el ámbito de la contaminación. La tecnología, en cualquier caso, avanza cada día, y Ceplafib contribuye a establecer un paradigma de actuación más verde, en términos de aprovechamiento de recursos. Mejorar las técnicas de reprocesamiento de los residuos plásticos y combinarlas con agentes modificadores o reforzantes garantiza que una proporción cada vez mayor de plásticos pueda volver a introducirse en el ciclo de producción después de su uso final.

A lo largo del proyecto Ceplafib se han probado diferentes formulaciones de compuestos, variando el contenido de fibras, agentes de acoplamiento y modificadores de impacto y sus proporciones. Con ello, se lograron desarrollar dos tipos de materiales óptimos adaptados a la tecnología de procesamiento de moldeo por inyección y termoformado, que confirman un módulo de elasticidad de hasta un 195% más alto y un 40% más de resistencia que la matriz simple de poliolefina reciclada. Además de características mecánicas excepcionales, los materiales Ceplafib aportan una ventaja económica general, ya que son entre un 25% y un 35% más baratos que los polímeros PP / PE vírgenes estándar y alcanzan precios entre un 40% y un 50% más bajos que los compuestos de plástico-madera disponibles actualmente en el mercado. Paralelamente, esto mejora las oportunidades para los fabricantes y proveedores a la hora de lograr sus objetivos de sostenibilidad, gracias a la transformación de los residuos en nuevas materias primas de alta calidad en una nueva cadena de valor.