Los directivos analizan las ventajas que aportan los modelos de trabajo flexibles

Los directivos analizan las ventajas que aportan los modelos de trabajo flexibles
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La Asociación de Directivos y Ejecutivos de Aragón (ADEA) ha organizado este martes un nuevo café virtual del Club de Liderazgo Emocional sobre el teletrabajo donde han constatado que “las empresas van a tener que ser flexibles si no quieren perder talento”.

En un momento en que muchas empresas están volviendo al trabajo presencial y otras implementando modelos de trabajo flexibles, los invitados han hablado sobre evolución de las nuevas formas de trabajo, sus ventajas e inconvenientes.

En la jornada han participado Belén Espejo, jefe de Desarrollo de Negocio de Voz, Digital Workplace y Colaboración en Telefónica; Manel Milian, director Comercial del grupo IWG, y Clara Cohen, experta en Inteligencia Cultural. Los tres ponentes han coincidido en que la productividad no se ha visto afectada en la época de teletrabajo a la que nos ha llevado la pandemia. Sin embargo, han explicado que existe necesidad de buscar fórmulas que permitan un contacto entre trabajadores y teletrabajadores en un entorno de creatividad y cercanía.

Espejo, que ha creado un libro blanco del Teletrabajo, ha insistido en que, “además de que las empresas han tenido que revisar su tecnología para adaptarse a estos modelos flexibles de trabajo e implementarlos con éxito, se trata de un cambio de modelo cultural y hay que derribar algunos muros culturales”.

Para Milian, “6 de cada 10 personas han tenido o siguen teniendo problemas de conectividad; el 50 % de las empresas tiene problemas para garantizar la seguridad de la información que se está manejando en el domicilio particular, y el 23 % de los trabajadores echan de menos ese aspecto de socializar con sus compañeros”. Como aspectos positivos del teletrabajo, Milian ha detallado “la disminución del tráfico y, por tanto, de CO2, la baja productividad causada por desplazamientos, el tiempo perdido, más flexibilidad financiera y menos costes de propiedad para las compañías”. También “un enfoque diferente del modelo de trabajo, más posibilidades de contratación, mejor salud mental y conciliación laboral y personal”. Se trata, ha afirmado, “de encontrar un equilibrio”.

Por su parte, Cohen ha insistido en la “sorprendente capacidad de adaptación de las personas y las empresas para afrontar este cambio, se ha demostrado que las cosas se pueden hacer de una forma diferente, que existen más posibilidades”. Cohen ha resaltado que, en 2021, en Estados Unidos, 60 millones de personas se han registrado como autónomos porque querían teletrabajar y su empresa no lo ha permitido o bien han perdido su empleo”.

Para concluir, el presidente de ADEA, Salvador Arenere, ha afirmado que “el verdadero cambio está en los directivos” y ha resaltado que “los modelos de trabajo flexibles presentan oportunidades, como la adquisición de responsabilidad y descubrimiento de nuevas capacidades en los empleados”. Arenere ha añadido que los nuevos modelos proporcionan “mayor confianza, mayor responsabilidad, mayor productividad y más felicidad por parte de los trabajadores”.