De la primera lavadora automática a la última tecnología: un paseo por 75 años de historia de Balay

La primera lavadora automática, la T500, marcó un antes y un después en los hogares de todo el país
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Mucho ha llovido desde que Esteban Bayona y José María Lairla abrieron en Zaragoza en 1947 un pequeño taller de fabricación de componentes radioeléctricos. Tres cuartos de siglo, 75 años de historia de una compañía, Balay, que siempre ha intentado ser pionera y valiente, con la primera lavadora automática, la T500, que marcó un antes y un después en los hogares de todo el país. Pocos ejemplares quedaran en uso de aquella lavadora T500. Una de ellas puede verse desde este miércoles en la exposición que Balay ha organizado en el Museo de Ciencias Naturales en la Universidad de Zaragoza, y que recoge, a partir de una mirada al pasado, toda la innovación que ha caracterizado a esta emblemática marca zaragozana. A estos 75 años Balay llega “más jóvenes que nunca”, como ha reconocido la jefa de marca, Beatriz Ruiz. “Es la marca que tenían nuestros abuelos y la que se compra la gente joven. Hemos mantenido nuestros valores y esencia, ser una marca de aquí, de la tierra, siendo capaces de innovar constantemente, renovarnos continuamente”, ha explicado. Durante la inauguración, el vicepresidente y consejero de Industria, Arturo Aliaga, ha situado a esta compañía como “uno de los referentes industriales” del sector de los electrodomésticos en todo el país. “Sobrevivieron a la reconversión industrial de los años 80 y, posteriormente, empezaron un camino inédito apoyándose en la Universidad de Zaragoza. Recordamos los centros de seguimientos de patentes, los planes Renove, para los que tuvimos que convencer a algunos ministros, y se anticipó en la producción de lavadoras o lavavajillas inteligentes que ahorran y basan su capacidad y su competitividad en la digitalización”, ha señalado. A su vez, el alcalde de Zaragoza, Jorge Azcón, ha remarcado que Balay es una “parte indisoluble” de la historia industrial de la capital aragonesa, siendo sinónimo de “calidad, innovación y excelencia”. “Es una muestra de lo que nuestra ciudad y su tejido empresarial son capaces de aportar a un sector tan competitivo como el de los electrodomésticos”, ha añadido. Junto a esta exposición, que se puede visitar hasta el 28 de junio en el Paraninfo de la Universidad de Zaragoza, Balay tiene previsto realizar varias actividades en la ciudad con un documental que narra seis historias vinculadas con la empresa y una serie de charlas divulgativas para compartir su experiencia y conocimiento a la sociedad.