El Gobierno de Aragón ha puesto sobre la mesa a las organizaciones agrarias algunas flexibilidades en la PAC para evitar que los profesionales pierdan sus ayudas ante una sequía “potencialmente catastrófica”. El consejero del ramo, Joaquín Olona, se ha comprometido a aplicar excepciones en los incumplimientos de resultados de la producción, siempre que “hayan hecho lo que tienen que hacer”, para compensar unas pérdidas que podrían llegar al 80% en algunas zonas de cereal en la campaña “más cara de la historia”.
Asimismo, se ha comprometido también a plantear al Ministerio otras flexibilidades como el incumplimiento de determinadas exigencias. “Yo no puedo decir que no pasa nada si no se siembra determinados cultivos, porque impediría pagar. Vamos a trabajar para conseguir que se produzcan esas excepciones en exigencias, evitando que se obligue a incurrir en costes a los agricultores en siembras que no tendrán ninguna posibilidad de éxito”, ha destacado Olona.
Del mismo modo, y más a largo plazo, ha planteado la necesidad de “seguir apostando” por una regulación “hiperanual” de los embalses, es decir, a almacenar agua en años húmedos para utilizarlas en tiempos de sequía, ya que, actualmente, solo se dispone de una regulación anual. Para ello, el consejero requiere más embalses y más grandes para “almacenar agua a lo largo de varios años”, siendo incluso insuficiente con los planteados hasta ahora, como Yesa o Molarroya.
Un planteamiento todavía incipiente y que, según Olona, ya estaría contemplado en el actual Pacto del Agua, aunque sería necesario “un mayor grado de cumplimiento” y “consolidar esta idea”. “Que haya sequía no justifica no hacer embalses. Es justo lo contrario. Nos enfrentamos a una mayor irregularidad, y una manera de corregirla es con regulación hiperanual”, ha sostenido el consejero, que ha mostrado su confianza en que llueva en próximos días.
SIN DESCARTAR AYUDAS DIRECTAS, INCLUSO SIN SEGURO
Estas medidas se las ha trasladado el propio Olona a las principales organizaciones agrarias, a quienes no ha descartado la adopción de ayudas directas a los agricultores o los créditos blandos, aunque prioriza el mantenimiento de la PAC, que en Aragón reparte más de 450 millones de euros. “No descarto ni tomar ni apoyar ninguna medida, pero primero vamos a garantizar el pago de la PAC”, ha afirmado.
Unas ayudas que se podrían plantear incluso sin seguro agrario, del que tanto Olona como los responsables de las asociaciones han criticado su escasa implantación en el territorio, que apenas llega al 26% de los agricultores. “Siempre priorizo el seguro, pero aquí hay que exculparles. Cuando el nivel de cobertura es el 26% no puedo condicionar ninguna ayuda cuando mayoritariamente no se ha suscrito. Quizá haya que preguntarse por qué no lo han suscrito. Lo tenemos que revisar”, ha expuesto.
“HACÍA MUCHOS AÑOS QUE NO SE CONOCÍA UNA SEQUÍA COMO ESTA”
Por parte de las organizaciones, el presidente de Asaja, José Manuel Cebollada, ha reclamado ayudas directas, exenciones fiscales para este mismo año, que es cuando “el agricultor las va a necesitar”, y la flexibilización de la PAC. “Los que se han sembrado no van a nacer, y los que se siembren ahora, todavía menos. Queremos que no haya penalizaciones. Este cambio de la PAC nos está mareando y muchas cosas no se van a poder cumplir. Necesitamos soluciones tangibles”, ha resaltado, recordando que la siembra está siendo “la más cara de la historia”.
Así, desde UAGA, José Antonio Miguel, secretario provincial en Zaragoza, ha enumerado algunas medidas fiscales que serían necesarias para “paliar pérdidas multimillonarias”, como la devolución de 20 céntimos/litro de gasóleo, ayudas directas por hectárea “más centradas en los profesionales que la PAC”, créditos blandos para afrontar la próxima campaña o moratorias en las cuotas de Seguridad Social. “Confiamos en que lleguen esas ayudas directas. La magnitud del problema a nivel nacional es tan grande que hay que priorizarlas”, ha señalado.
En la misma línea, el presidente de Araga, Jorge Valero, ha pedido “medidas compensatorias” para evitar que la agricultura “se vaya a la quiebra”, con “lo que ello supondría para el territorio, la diversidad y el medio ambiente”. “Tiene que tomarse decisiones coyunturales y directas, como ayudas que vayan a la vena de la economía de los agricultores. Hay que aplicar las excepcionalidades necesarias para que la PAC se cobre este año en tiempo y forma”, ha sostenido.
Igualmente, el secretario de Organización de UPA, Enrique Arceiz, ha lanzado un “SOS” ante un problema que “vamos a tener todos los ciudadanos” por una sequía que “hacía muchos años que no se conocía”. “Había sequías donde se ha cosechado un poco de cereal y algunos cultivos de verano se salvaban, pero este año se va a perder un 80 o 90% de cereal y el arroz, maíz o girasol no se podrá cosechar, los leñosos de regadío tendrán mucha reducción de agua o los pastos de ganadería ya pueden estar contentos si sobreviven”, ha detallado.
Desde las cooperativas, su presidente, José Víctor Nogués, ve “muchos problemas” para mantener los puestos de trabajo y los mercados si no se soluciona esta grave situación. “Tenemos contratación de personas en todas las plantas y fábricas que duran hasta Navidad. Si no hay materia prima, tendremos que hacer ERTE o buscar y negociar planes para los puestos de trabajo cualificados, que son los difíciles de mantener”, ha mantenido.
