Sector cárnico, riders y agricultores: Aragón detectó más de 1.300 falsos autónomos en 2022

Riders de Glovo
photo_camera La legislación española fue pionera con la Ley Rider, que ha conseguido frenar el número de falsos autónomos

La Inspección de Trabajo contabilizó un total de 1.322 falsos autónomos en Aragón el año pasado, lo que supone un descenso con respecto a 2021 de 478 fraudes. La mayoría se detectaron en el sector cárnico, en empresas de reparto a domicilio con los famosos “riders” y en el sector agroalimentario, aunque este último ha bajado progresivamente en los años anteriores. Unos datos que ha facilitado la consejera de Economía, Marta Gastón, que ha incidido en que “a pesar del incremento de la normativa y la buena labor de la inspección, no solo coercitiva sino también preventiva, sigue siendo una cifra elevada”.

En total, el fraude laboral en 2022 ha supuesto un importe de 36,5 millones en Aragón, de los que 17,7 millones pertenecen a sanciones a empresas y el resto a liquidaciones a la Seguridad Social. Esto supone un incremento con respecto al año anterior, que fue de 30 millones. La directora Estatal de la ITSS, Carmen Collado, ha asegurado que no existe un incremento del fraude laboral, sino que se tiene “más capacidad de detectar indicios con las nuevas tecnologías, que permiten inspecciones de forma masiva”.

EL FOCO ESTÁ PUESTO EN LOS FIJOS DISCONTINUOS Y EL TELETRABAJO

En cuanto a la detección de falsos autónomos por sectores, la legislación española fue pionera con la Ley Rider, que ha conseguido frenar el número de fraudes y servirá como ejemplo para las directivas europeas. “El sentido común te dice que son trabajadores por cuenta ajena. Es una persona que va en una bicicleta repartiendo, que le dirige su trabajo la plataforma y le dice donde tiene que ir. Es evidente que estamos ante un trabajo dependiente pero formalmente se regulaba de otra manera”, ha explicado Collado.

El sector cárnico presenta una modalidad distinta de falsos autónomos, ya que se realizaba a través de cooperativas fraudulentas alegando que estos trabajadores eran socios. “En este caso costó mucho inicialmente, porque no teníamos el aval de la justicia. Finalmente pudimos argumentar con mayor solidez cómo estábamos ante una falsa cooperativa que pretendía burlar los derechos de los trabajadores simulando que eran socios, cuando eran trabajadores por cuenta ajena”, ha recalcado la directora.

Ahora, el foco está en el cumplimiento de las modalidades que introdujo la reforma laboral, como la figura del fijo discontinuo, para evitar que no se encubra un contrato temporal. También preocupa el teletrabajo, ya que la modalidad habitual de la inspección es visitar el centro de trabajo, que en este caso es el domicilio. “Se pueden hacer controles documentales y controles informáticos de la actividad, pero hay cosas que se nos quedan sueltas. Es uno de los retos del presente y del futuro”, ha concluido.

JORNADAS SOBRE INSPECCIÓN DE LA SEGURIDAD SOCIAL

Este es uno de los temas que se aborda en las jornadas “La Inspección de la Seguridad Social: retos en el mercado laboral”, que reúnen en Zaragoza a 250 asistentes y 20 ponentes a nivel nacional. También se tratarán otras áreas como los delitos en materia de Seguridad Social, con expertos letrados y servicios jurídicos, así como la nueva cotización de autónomos y las distintas novedades tecnológicas relacionadas con la inspección laboral.