La «escuela inclusiva» o la «educación inclusiva» prioriza la atención, en el proceso de enseñanza-aprendizaje, del alumnado vulnerable a ser excluido socialmente. Compleja situación en las escuelas en donde la diversidad requiere, por parte del profesorado y de los responsables de los centros, competencias específicas y recursos para crear proyectos educativos en esta línea. Ha diferencia de la «integración», que se limita a vincular este perfil de alumnado en el marco de las estrategias docentes existentes en el centro, la «inclusión educativa» implica adecuar o adaptar el proceso de enseñanza-aprendizaje a las características particulares de este tipo de estudiante: un reto, que bien enfocado, constituye una experiencia de aprendizaje enriquecedora para toda la comunidad del centro.
Recientemente hemos tenido noticia de una experiencia, en esta línea, en el Colegio de Educación Especial Ángel Rivière. Los cuentacuentos asumen el protagonismo con la participación de personalidades de la cultura, la economía y la empresa. Finalidad, apoyar la inclusión de los niños con discapacidad. El relato, la oralidad y los gestos confluyen en el cuentacuento siendo probablemente una de las metodologías de enseñanza más personal: permite la conexión entre las personas. La imaginación a través de las palabras. En un entorno cotidiano pero que niñas y niños transforman en mágico. Resaltar que en esta iniciativa los contenidos están vinculados a los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
Por otra parte, trabajar en el marco de la educación inclusiva requiere de recursos y de formación específica del profesorado. El proyecto, Erasmus+ KAI Observación e Inclusión, es un ejemplo del interés europeo de hacer la idea de «inclusión» una competencia transversal en los colegios. Una vía es la movilidad de los docentes para conocer experiencias de buenas prácticas en temas de inclusión educativa. El Colegio Público de Educación Especial Gloria Fuertes, en Andorra (Teruel), participa de este proyecto junto con profesores de Portugal, Bélgica y Suecia. Su objetivo, «conocer la inclusión y las nuevas metodologías de trabajo, motivación multisensorial, comunicación e inserción laboral».
Los centros educativos son un entorno excepcional para que niños y niñas conozcan la importancia de la inclusión de aquellos compañeros y compañeras que están en riesgo de exclusión social. Se trata de crear comunidades activas en donde la solidaridad, el respeto y el reconocimiento del otro sean claves de una mejor convivencia.
