El curso académico 2022-2023 inicia su andadura. En las aulas, pasillos y patios, el bullicio, el ruido y algarabía retoman su protagonismo. Abrazos, reencuentros, nervios y volver a vivir la vida escolar o académica con una normalidad alejada, al menos cada vez más, de las dificultades que nos trajo el COVID; aunque, como se suele decir, no hay que bajar la guardia ni confiarnos.
Aunque esta sensación positiva de inicio del curso académico hay que disfrutarla no podemos ignorar que, como si de una carrera con obstáculos se tratara, profesorado, alumnado y familias, tendrán que asumir que se deben focalizar en la meta, ajustar el ritmo y ser consciente que la educación es clave para afrontar los tiempos actuales.
Hay diversidad de temas abiertos en la comunidad educativa, en todos los niveles. Van desde las dificultades en las familias para cubrir los gastos del nuevo curso hasta la LOMLOE que está generando incertidumbres más que certezas. La realidad del acoso escolar y sus implicaciones sigue siendo una tarea pendiente. Los interrogantes sobre cómo asumir las extraescolares con la conciliación familiar. Se plantea un nuevo currículo educativo en la Educación Secundaria Obligatoria (ESO) y Bachillerato, ya publicados en el Boletín Oficial de Aragón (BOA).
La Formación Profesional (FP) se fortalece. La dinámica universitaria explora nuevas investigaciones, titulaciones y alianzas. Este primer curso académico se aleja de aquellos marcados por la COVID-19, del colegio en casa, de las mascarillas, del aula ciento por ciento en línea.
Las aulas universitarias, recintos feriales y auditorios, vuelven a programar congresos nacionales e internacionales. La vida académica recobra los escenarios de debate, de las reflexiones y del diálogo, sin la mediatización tecnológica de las plataformas en línea, aunque han llegado para complementar la actividad presencial. En cualquier caso, iniciar con ilusión este curso académico es pertinente y oportuno para asumir con una mejor actitud los obstáculos que, por diversos motivos, acechan a la educación.
