El Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia es una oportunidad para poner en valor el impacto de la mujer en la ciencia. Mayor visibilidad y motivar a niñas y niños por la carrera científica. Este tipo de iniciativas tiene la finalidad de «conectar a la comunidad internacional con las mujeres y las niñas en la ciencia». Resaltar el papel que desempeña la mujer en la comunidad científica permitirá contribuir a reforzar «los lazos entre la ciencia, la política y la sociedad para buscar estrategias orientadas a mejorar el futuro de estas».
La figura de mujeres representativas de las diversas áreas del conocimiento no tendría que ser algo excepcional en las aulas de clases, en cualquier nivel educativo. En las primeras etapas de la enseñanza la búsqueda de referentes y modelos son claves en el aprendizaje. Iniciativas como «Soy científica. Vivo en tu barrio», en Zaragoza, u otras actividades lideradas desde instituciones educativas o desde el Gobierno de Aragón (https://www.aragoninvestiga.es/), facilitan conectar ciencia-mujer-sociedad con el espacio público y ser al mismo tiempo un espacio común de aprendizaje.
En países como España, aunque queda todavía trabajo por hacer, sin duda se ha avanzado por impulsar, reforzar y afianzar la vocación científica de las niñas. Aunque sabemos la complejidad, por diversas razones, que hay en otros países. El listado de nombres propios nacionales e internacionales es extenso, pero si motiva a buscar más información y conocimiento, es bienvenido: Marie Curie, Irène Joliot-Curie, Gerty Cori, Maria Goeppert-Mayer, Dorothy Crowfoot Hodgkin, Rosalyn Sussman Yalow, Barbara McClintock, Rita Levi-Montalcini, Gertrude Belle Elion, Christiane Nüsslein-Volhard, Linda B. Buck, Françoise Barré-Sinoussi, Elizabeth Blackburn, Carol W. Greider, Elinor Ostrom, Ada Yonath, May-Britt Moser, Youyou Tu, Dona Strickland, Frances Arnold, Esther Duflo, Andrea Ghez, Emmanuelle Charpentier, Jennifer A. Doudna, Carolyn R. Bertozzi, Annie Ernaux, Ada Lovelace.