Eloy Suárez: "A la derecha no nos costará ponernos de acuerdo porque pensamos en los ciudadanos"

Eloy Suárez repite como cabeza de lista del PP al Congreso por Zaragoza
photo_camera Eloy Suárez repite como cabeza de lista del PP al Congreso por Zaragoza

Eloy Suárez volverá a ser el número 1 por Zaragoza de la lista del Partido Popular al Congreso de los Diputados para las elecciones del 10 de noviembre. Una repetición electoral que, para él, tiene un culpable, Pedro Sánchez, a quien critica no haber sabido alcanzar acuerdos con la izquierda y no escuchar a las fuerzas de la derecha.

Por ello, Suárez vaticina “sorpresas” en los comicios del 10-N que “van a encantar” a los populares y confía en que, si las fuerzas de la derecha tienen la posibilidad de gobernar, no tarden en ponerse de acuerdo para desbloquear el país. Todo ello con los escenarios de violencia en Cataluña como telón de fondo y con problemas a tratar en Aragón, como la transición energética en las Cuencas Mineras, la despoblación o la financiación autonómica.

Pregunta.- Otra vez a elecciones…
Respuesta.- Porque alguien ha decidido que haya elecciones. El presidente del Gobierno fue incapaz de alcanzar un pacto cuando tenía diversas opciones. Pablo Casado, en la primera visita, le ofrece llegar a acuerdos determinados, un presupuesto que cumplimentara el déficit, no subir los impuestos, y mantener la vigencia de la Constitución, el orden y la legalidad en Cataluña. Tampoco pedimos nada raro, pero ni siquiera contestó. A partir de ahí, Ciudadanos nos copia la propuesta a última hora, pero Sánchez tampoco quiso saber nada, y con la izquierda que le había apoyado en esa moción de censura injusta no sabemos muy bien qué pasó, pero tampoco quiso conformar gobierno. Me resulta complicado de entender cómo en un sistema parlamentario donde la base son los acuerdos de gobernar, Sánchez ha sido incapaz, con lo fácil que se lo había puesto.

P.- Vistas las encuestas y el fracaso de abril, ¿se ven como los grandes beneficiarios de la repetición electoral?
R.- Evidentemente mejoramos resultados y, a partir de ahí, no considero que seamos beneficiarios. Sencillamente, la irresponsabilidad de Sánchez hace que falle su cálculo electoral estrepitosamente y no gana todo lo que pensaba. La única encuesta que sirve es la del 10 de noviembre. El pueblo español es muy maduro y va a volver a cumplir con ese requisito sagrado de emitir el voto. Creo que los españoles van a dar una lección de que este país es una gran democracia. Estoy convencido de que va a haber sorpresas que a unos no le gustarán y a otros nos van a encantar.

Suárez vaticina “sorpresas” en los comicios del 10-N que “van a encantar” a los popularesSuárez vaticina “sorpresas” en los comicios del 10-N que “van a encantar” a los populares

P.- ¿Es posible una gran coalición PSOE-PP?
R.- Sánchez ya ha dicho que no. Lo dijo el 28 de abril y antes de que llegue el 10 de noviembre y se sepa quién es el más votado ya ha dicho no a pactar con el PP. Difícilmente podemos llegar a un acuerdo con quien no quiere saber nada de nosotros. Lo que está sucediendo viene arrastrado de 2006 o 2007 con el Pacto del Tinell. El PSOE decide romper el consenso de la Transición y busca dividir a un país que había funcionando perfectamente, alcanzando acuerdos con gobiernos de PP y PSOE, como la lucha antiterrorista o el tránsito de un Estado central a autonómico. Es Zapatero quien reedita las dos Españas y Sánchez es un discípulo aventajado. Solo plantea que nada para el rival político, y eso es muy complicado en un sistema parlamentario donde tú necesitas tener una mayoría que sostenga el Gobierno. Y Sánchez se ha olvidado de eso.

P.- Como suele decirse, si en abril éramos pocos con VOX, se suma Más País y además Teruel Existe. ¿Cómo va a afectar?
R.- Desde luego, para nada será positivo. Aquellos augurios de que el multipartidismo iba a beneficiar a este país no son así. Realmente, desde 2016 cuando irrumpen en escena distintas formaciones políticas, el país está paralizado. Y eso que reconozco que en el PP tuvimos bastante cintura como para sacar adelante un presupuesto con siete partidos. Va a ser complicado gobernar en escenarios con tanto partido y poca altura de miras. Me cuesta entender el error de Albert Rivera, pudiendo haber sido una parte importante del Gobierno de Sánchez, prefirió tener otros horizontes como un sorpasso al Partido Popular. Es otro de esos errores de cálculo imperdonables en política.

P.- ¿Qué relación tienen con Teruel Existe? ¿Ven un posible aliado o creen que se irán a la izquierda?
R.- Con los componentes que sabemos que tienen, me da la sensación de que se va a ir a la izquierda. Hace planteamientos maximalistas que no van a ser fáciles de comprar. Uno puede tener pretensiones importantes, y un listón alto, pero la realidad económica es muy tozuda y en tiempos de crisis es complicado ejecutar infraestructuras. El PSOE ha ralentizado todas las inversiones de este año para cumplir el déficit. Aquí en Aragón se han parado las infraestructuras hidráulicas, se han ralentizado las carreteras, se ha dejado de gastar dinero del presupuesto de 2018. En un presupuesto que, por primera vez en la historia, había 70 millones para el ferrocarril de Teruel, el PSOE no ha ejecutado nada. Son cosas de la política cuando se hace de forma irresponsable.

P.- En la izquierda ya se han visto las dificultades para ponerse de acuerdo. En la derecha, ¿ve más factible que PP, Cs y VOX se pongan de acuerdo si suman 176 escaños?
R.- No creo que la izquierda tenga dificultades para ponerse de acuerdo. Puedo poner mi ejemplo. Después de haber ganado las elecciones a la Alcaldía con “15,9” concejales, tardaron un día en ponerse de acuerdo. El problema es que Sánchez ha decidido que hay que votarle porque él lo vale, sin pactos de gobernabilidad, de legislatura y sin entrar en el gobierno, y mientras siga en esa actitud, ni izquierda ni derecha se pondrá de acuerdo con él. Nosotros hemos conformado gobiernos con Ciudadanos, donde los habitantes están comprobando que hay beneficios importantes. Yo creo que a nosotros no nos costará mucho ponernos de acuerdo, porque pensamos en los ciudadanos.

Desde el PP proponen una financiación autonómica que garantice la sanidad, la educación y los servicios sociales en las zonas despobladas

P.- ¿Teme que la situación en Cataluña polarice toda la campaña y no se hablen de otros temas?
R.- Una campaña nacional es difícil. Yo soy aragonés y me preocupan las cosas de Aragón, pero también me preocupa, y mucho más, el conjunto del país. Son elecciones nacionales y hay que pensar en el conjunto del país, de ahí que no se territorialicen los debates. En Cataluña vivimos una situación anómala y extraordinaria, con un presidente que no respeta la legalidad y que condiciona el resto del país. ¿Alguien piensa que lo que sucede en Cataluña no tiene proyección en el exterior y los inversores se lo piensan dos veces? Se están produciendo cosas anómalas, fruto de una situación excepcional. Entiendo que Cataluña polarice de forma importante el debate, pero no que se diga que solo hay un problema de orden público. Hay un problema bastante más importante.

P.- ¿Qué solución planean para las Cuencas Mineras?
R.- Hay que hacer una transición justa y poner recursos económicos. No somos sospechosos de no haber puesto recursos ecónomos para Teruel. El FITE lo inventó el PP, hasta que este año se ha cambiado la filosofía. Ya no solo son inversiones, sino también gasto público. Se ha perdido un elemento determinante que era la creación de empleo y ahora servirá para cualquier cosa. Nos hubiera gustado es una demora en el tiempo del uso del carbón, como ha hecho Alemania. Intentamos plantear esa demora en el Congreso, pero no hubo ni un partido que apoyara al PP en 2017. Vamos a pagar las consecuencias.

P.- ¿Cómo encarará el problema de la financiación autonómica?
R.- Es un tema complejo, que requiere recursos económicos. Si no hay dinero para repartir es difícil que las comunidades autónomas salgan satisfechas. Para abordar esa cuestión hay que tener una economía saneada, hacer frente a la crisis que está viniendo y una vez que tengamos recursos suficientes, plantear esa financiación autonómica. Cuando gobernaba el PP en 2017 o 2018 no éramos mayoría, pero le planteamos al PSOE una financiación autonómica con tres servicios, sanidad, educación y servicios sociales, y una formula matemática para revalorizar la asignación de esos recursos. Tuvimos la callada por respuesta. Si gobernamos, la volveremos a plantear. Desde Aragón reclamaremos que se tengan en cuenta los factores de territorio y de dispersión de población. Hay que ir al territorio para saber cuánto cuestan los servicios.

P.- ¿Qué propuestas tiene para mejorar las infraestructuras de Aragón?
R.- Hay desafíos como los desdoblamientos de la N-232 y la N-II. Hacen falta partidas presupuestarias como los 10 millones que había para el tramo Burgo de Ebro-Fuentes de Ebro y que el PSOE no se ha gastado. En 2019, tras venir Ábalos a una bilateral y salir felices y contentos, la N-232 y el Canfranc eran prioritarios, y la respuesta en el proyecto de presupuestos que no nació fue un millón para Canfranc y 100.000 euros para la N-232. La realidad es que a Lambán y a los aragoneses nos toma el pelo Sánchez porque son dos líderes que chocan. También lo hemos visto con el anuncio de la implantación de una gran empresa en Zaragoza, con una lucha patética por la paternidad.