Entrevista a Daniel Cuairán Cañete: «No todo el mundo puede ser maestro, tienes que estar hecho de otra pasta»

Actualmente es maestro en el estado de Illinois en Carpentersville, Estados Unidos
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DANIEL CUAIRÁN CAÑETE (Zaragoza, 1992) se define como una persona «activa, positiva y con ganas de probar cosas nuevas y experimentar». Es maestro en el estado de Illinois en Carpentersville, Estados Unidos gracias al programa de Profesores Visitantes del Ministerio de Educación, Cultura y Deporte del Gobierno de España. Imparte clases en el programa Dual (50% español y 50% inglés) del District 300 impartiendo Matemáticas, Ciencias y Estudios Sociales. Como el comenta: «venimos a EE.UU. a cubrir distintas necesidades del sistema educativo estadounidense. En mi caso, satisfacer la demanda en Illinois de maestros para los programas Duales que tratan de proveer de una educación accesible para los estudiantes de habla hispana que tratan de aprender inglés o estudiantes de habla inglesa que tratan de aprender español.

“Mis estudiantes, me han enseñado a mantener la perspectiva de un niño, es algo que los maestros podemos perder fácilmente”

¿Cuáles fueron los motivos por los cuáles decidió ser profesor?

En mi caso mi familia tuvo una gran influencia, pero creo que también es algo que mi personalidad exigía. Mi madre fue maestra y crecí con sus historias de clase y de sus niños, recuerdo lo mucho que disfrutaba de su profesión y lo llena que sentía hablando del cole al que dedicó toda su carrera. Mi padre también ha sido profesor en la Universidad de Zaragoza. Cuando estaba en bachiller, que es una época clave para elegir un rumbo, mis 4 primos pequeños me hacían disfrutar muchísimo y tuvieron un peso muy importante en mi decisión, sabía que estar en contacto con niños era algo que me hacía sentir alegre y feliz. Finalmente, creo que mi personalidad se adapta mucho a esta profesión, ser una persona activa, positiva y con ganas de probar cosas nuevas y experimentar es algo que facilita las cosas a la hora de adaptarse a las nuevas generaciones.

“Sin duda esa entrega y pasión que ponen en su trabajo cada día miles de profesionales en España es nuestra gran fortaleza y nuestra seña de identidad.”

En su trayectoria como profesor, ¿cuáles han sido los aprendizajes obtenidos qué destacaría?

Los aprendizajes más valiosos en mi carrera me los han regalado mis niños y mis compañeros. Mis estudiantes, me han enseñado a mantener la perspectiva de un niño, es algo que los maestros podemos perder fácilmente y que tenemos que trabajar para mantener viva, es esencial empatizar con nuestros estudiantes, escucharlos y entenderlos. Mis compañeros, por otro lado, me han enseñado a disfrutar de mi profesión no sólo cuando estoy en el aula. A valorar la importancia de formar parte de ese concepto llamado “cole”, de sentir ese apoyo tan necesario en nuestra profesión cuando estás teniendo una semana o una temporada difícil. Me han enseñado a cuidar los unos de los otros. Ambos, me han enseñado que todos los esfuerzos que les dedicas ya sean preparando tus clases o trabajando en equipo se te devuelven con un enorme cariño.

“Debemos trabajar para garantizar unos estándares mínimos de calidad de enseñanza que no dependan sólo de la buena voluntad.”

La pandemia ha puesto en evidencia las fortalezas y debilidades del sistema educativo, a su entender, ¿qué debería mejorarse y cuáles fortalezas deberíamos reforzar?

Durante estos meses no he parado de oír por parte de muchas familias las auténticas heroicidades que han hecho la gran mayoría de maestros por sus hijos, sin duda esa entrega y pasión que ponen en su trabajo cada día miles de profesionales en España es nuestra gran fortaleza y nuestra seña de identidad que se ha vuelto más visible en el momento en el que nuestro trabajo se ha trasladado a los hogares. Se nos ha pedido que nos adaptemos a una forma de enseñanza y una metodología para las que no estábamos preparados, y lo hemos hecho por amor a nuestros estudiantes.

Sin embargo, la brecha tecnológica que ha mostrado nuestro sistema educativo es algo que tenemos que atacar sin ninguna duda. En primer lugar, con la formación del profesorado, no sólo en el Grado de Magisterio, sino implementando un sistema de formación constante de nuestros maestros en el sistema educativo a nivel estatal. En segundo lugar, con la dotación de recursos tecnológicos a todos los estudiantes y a los centros educativos. Debemos trabajar para garantizar unos estándares mínimos de calidad de enseñanza que no dependan sólo de la buena voluntad que cada maestro o institución haya decidido poner o de los recursos de los que dispone cada familia.

“Podemos formar grandes profesionales, pero si dejamos de alimentar los corazones y los valores de nuestros estudiantes nunca podremos formar buenas personas.”

Aunque es difícil dejar a un margen la pandemia y sabiendo que ella pasará, ¿cuáles son a su entender los principales retos de la educación en los próximos años?       

Creo que uno de los principales retos que se nos presenta es preparar a las nuevas generaciones para las exigencias de una sociedad futura que no podemos conocer ni anticipar. La sociedad y la tecnología avanzan a un ritmo abrumador y es difícil determinar cuáles serán las habilidades que la sociedad exigirá a nuestros estudiantes dentro de 15 años para poder comenzar a dotarlos de las mismas. Para ello, considero fundamental asegurar por parte de la administración no sólo recursos, sino también una formación constante del profesorado para que podamos anticipar estos cambios y podamos ofrecer una educación de calidad a nuestros niños sin que esto dependa de la buena voluntad de los maestros que no siempre tienen porqué tener el tiempo o los recursos para seguir formándose.

Finalmente, no dejar de lado las emociones. Podemos formar grandes profesionales, pero si dejamos de alimentar los corazones y los valores de nuestros estudiantes nunca podremos formar buenas personas, y al final nuestro país será más rico si tiene profesionales con valores nobles.  

“Hacer un ejercicio de empatía hacia lo que supone el día a día de un maestro puede beneficiar enormemente nuestro reconocimiento social.”

Se suele comentar que los profesores, en todos los niveles, han perdido o están perdiendo el reconocimiento social. ¿Cómo lo percibe usted? Si considera que es así, ¿cuáles son las causas? 

Personalmente, siempre me he sentido muy respetado por todas las personas con las que he estado en contacto, tanto las familias con las que he trabajado como mi propia familia y mis amigos. En la escuela, mis estudiantes, sus padres y mis jefes han aceptado mis decisiones y agradecido mi trabajo tanto en España como en Estados Unidos. Me gustaría poder decir que todos los maestros que conozco han tenido esta experiencia, pero tristemente no es así.

Resulta muy duro ver a excelentes maestros poniendo todo su esfuerzo, pasión y por supuesto su conocimiento en su trabajo diario y ver cómo son constantemente castigado por un motivo u otro. Por supuesto, no siempre tomamos la mejor decisión en el momento adecuado, pero nuestra profesión exige una constante toma de decisiones hacia nuestros estudiantes que puede tener una gran repercusión. Hacer un ejercicio de empatía hacia lo que supone el día a día de un maestro puede beneficiar enormemente nuestro reconocimiento social.

“El aprendizaje que se adquiere cuando emociones positivas están a flor de piel es el más significativo y el que más perdura en el tiempo.”

Finalmente, creo que si se garantiza una formación constante del profesorado, un sistema de feedback constructivo mediante observaciones puntuales de nuestras prácticas educativas en las aulas con el objetivo de ayudarnos a mejorar, una liberación de carga burocrática que nos permita centrarnos más en nuestros niños y nuestras actividades y se nos compensa económicamente por las horas reales que invertimos, nuestro reconocimiento social será mayor porque ser maestro supondrá también ajustarse a unos estándares mínimos de mejora constante.

“Todo por amor, nada por fuerza. Nuestra profesión requiere cariño, pasión y comprensión.”

 Hay diversidad de metodologías de enseñanza. Usted ha aplicado varias. ¿Es posible enseñar utilizando metodologías innovadoras? ¿Cuáles son aquellas que ha utilizado y ha permitido que su alumnado obtenga mejores resultados o competencias?

Es posible y totalmente necesario. Las nuevas metodologías buscan generar y despertar emociones en los niños mientras se presentan contenidos y adquieren nuevos conceptos, además de prepararlos para las necesidades sociales del futuro. El aprendizaje que se adquiere cuando emociones positivas están a flor de piel es el más significativo y el que más perdura en el tiempo. Cada generación de niños es diferente a la anterior, su forma de relacionarse y de aprender está en constante movimiento y los maestros tenemos que adaptarnos a estos cambios, dejar atrás nuestra zona de confort y abrazar nuevos retos y oportunidades para crecer, manteniendo fórmulas que funcionan bien.

Personalmente, el Aprendizaje Cooperativo combinado con un constante refuerzo positivo creo que tiene un enorme potencial para generar esas emociones que buscamos en los estudiantes. Si a esta fórmula le sumamos el Aprendizaje Basado en Proyectos y la Gamificación se crea una escuela a la que nuestros estudiantes se despertarán cada mañana deseando acudir.

“Todos habrán escuchado que estudiar magisterio es algo que todo el mundo puede hacer, lo que no se dice es que no todo el mundo puede ser maestro, tienes que estar hecho de otra pasta.”

En las aulas universitarias tenemos futuros maestros y maestras que se preparan para ser profesores de infantil, primaria, bachillerato y ESO. ¿Qué ideas considera deberían tener siempre presente en la enseñanza?

Todo por amor, nada por fuerza. Nuestra profesión requiere cariño, pasión y comprensión. Durante estos años, todos habrán escuchado que estudiar magisterio es algo que todo el mundo puede hacer, lo que no se dice es que no todo el mundo puede ser maestro, tienes que estar hecho de otra pasta. Encontrar el balance entre ser un maestro o maestra exigente y no olvidar transmitir cariño y entender a tus estudiantes es algo complejo que requiere paciencia y un gran corazón. Nunca olvidéis poner todo vuestro amor en cada paso que deis hacia vuestra aventura de ser maestros, este es el motor de nuestra profesión y lo que os llevará a ser los maestros que los niños necesitan.

“Nunca olvidéis poner todo vuestro amor en cada paso que deis hacia vuestra aventura de ser maestros, este es el motor de nuestra profesión y lo que os llevará a ser los maestros que los niños necesitan.”

Experiencia profesional

Sus inicios como maestro fueron en el colegio Nuestra Señora del Carmen (Carmelitas) de Zaragoza. Estuvo tres años impartiendo materias como maestro bilingüe en Science, Social Studies, English o Physical Education. En su último año antes de viajar a los Estados Unidos asumió la coordinación del proyecto de E.F bilingüe desde 1º de Primaria hasta 6º de Primaria. Graduado en Magisterio de Primaria con especialidad en E.F por la Universidad de Zaragoza con Máster en Competencias Docentes Avanzadas por la UCJC.