El Rey insta a Marruecos a "caminar juntos para empezar a materializar" una nueva relación con España

El Rey en un acto de recepción de las Cartas Credenciales de los nuevos embajadores. Foto: Casa de S.M. el Rey
photo_camera El Rey en un acto de recepción de las Cartas Credenciales de los nuevos embajadores. Foto: Casa de S.M. el Rey
El Rey ha instado este lunes a Marruecos a "caminar juntos para materializar" una nueva relación y ha destacado que España "seguirá haciendo todos los esfuerzos necesarios para la creación y consolidación de un espacio común de paz, estabilidad y prosperidad " con este país.
Así se ha manifestado en el discurso que ha pronunciado en el salón del Trono del Palacio Real en la tradicional recepción al cuerpo diplomático acreditado en España. Acto al que ha asistido el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez y el ministro de Asuntos Exteriores, UE y Cooperación, José Manuel Albares. "Con Marruecos, nuestros respectivos gobiernos han acordado redefinir conjuntamente una relación para el siglo XXI, sobre pilares más fuertes y sólidos. Ahora, ambas naciones debemos caminar juntas para empezar a materializar ya esta nueva relación. Se trata de encontrar soluciones a los problemas que preocupan a nuestros pueblos", ha remarcado el Monarca. Don Felipe ha definido de "estratégica para España" la relación con el Magreb por "nuestra cercanía y la intensidad de los múltiples vínculos" que "configura una relación de clara interdependencia. Por ello, nuestro país seguirá haciendo todos los esfuerzos necesarios para la creación y consolidación de un espacio común de paz, estabilidad y prosperidad. Nuestra acción se asienta sobre lazos sinceros y respetuosos de amistad y cooperación que queremos seguir preservando y reforzando con el conjunto de nuestros socios magrebíes". Las relaciones con Marruecos no pasan por buenos momentos desde que España acogió en el mes de abril al secretario general y máximo responsable del Frente Polisario, Brahim Gali en un hospital de La Rioja, afectado de la Covid-19. Un mes después las autoridades marroquíes relajaron los mecanismos de control en la frontera de Ceuta y se produjo la entrada de más de 8.000 inmigrantes en situación irregular. Desde entonces las relaciones bilaterales entre ambos países no pasan por un buen momento. En este sentido, don Felipe también ha hecho mención a la inmigración, de la que ha dicho "seguirá siendo una prioridad para nuestra acción exterior. En este sentido, su naturaleza estructural, debe abordarse con una visión estratégica, solidaria y de manera coordinada con nuestros socios de la UE, y estableciendo mecanismos estables para hacer de la migración un hecho seguro para el migrante y ordenado para los Estados que han de gestionarla. Es responsabilidad de todos los países atajar y perseguir el abuso, el lucro y el total desprecio a la dignidad humana de las redes criminales que trafican con las personas que huyen de la desesperanza, aprovechándose de su vulnerabilidad". Así mismo, se ha referido a la pandemia y ha subrayado que "España se ha convertido en uno de los principales donantes de vacunas del mundo y en uno de los principales defensores de la vacunación universal. En 2022, seguiremos donando vacunas hasta llegar a los 50 millones de dosis en el primer trimestre, en línea con los objetivos de donación europeos". Y sobre la crisis de Kazjistán, Don Felipe ha reconocido "el papel destacado de Rusia como actor relevante para la estabilidad de la región euroasiática", y ha recordado, a su vez, que España "junto con nuestros socios en la Unión Europea, tenemos el convencimiento firme de que la soberanía y la integridad territorial de los Estados son requisitos esenciales e irrenunciables para construir unas relaciones fructíferas y pacíficas. El respeto de las fronteras es la base de la paz en Europa".