Los contenedores marrones de Huesca recogen desde su instalación más de 1,6 millones de kilos

El alcalde de Huesca, Luis Felipe, ha visitado este viernes la planta de compostaje y ha remarcado que Huesca “es una ciudad que apuesta por el reciclaje y por una economía sostenible”. “La materia orgánica representa aproximadamente el 40% del total de los residuos que generamos en casa, por ello es tan importante concienciar sobre la necesidad de su reciclaje”, ha añadido el alcalde. Por su parte el concejal de Medio Ambiente, Roberto Cacho, ha incidido en la importancia de evitar que estos residuos orgánicos vayan al vertedero: “No solo reducimos las emisiones de CO2, también generamos compost que se utiliza como abono para las zonas verdes y que, a partir de ahora, también se va a repartir en el punto limpio de la ciudad para que puedan utilizarlo todos los ciudadanos”. Para recoger compost es necesario tener la tarjeta que se utiliza para abrir el contenedor de materia orgánica. Además, los usuarios deberán llevar una bolsa o saco para recogerlo. La recogida selectiva de la fracción orgánica ya está implantada en siete barrios de Huesca: María Auxiliadora, Santiago, San José, La Encarnación, San Lorenzo, Catedral y San Pedro. Además, el concejal de Medio Ambiente, Roberto Cacho, ha anunciado que antes de que acabe el año la recogida de la materia orgánica llegará a toda la ciudad con la instalación de contenedores en los barrios de Santo Domingo y San Martín y del Perpetuo Socorro. En estos momentos en la ciudad hay 292 contenedores de color marrón que precisan de una tarjeta electrónica para su apertura, y cinco máquinas expendedoras de bolsas compostables (Biblioteca avenida Pirineos, Centro Cultural Manuel Benito Moliner, avenida Martínez de Velasco Nº26, calle Teruel Nº16 y piscinas Almériz). En estos contenedores se pueden depositar todos los residuos domésticos de materia orgánica como peladuras de alimentos, restos de comida cocinada, cáscaras de alimentos, huesos y espinas, pan duro, posos de café, papel de cocina, flores y bolsitas de infusión, entre otros. Planta de compostaje  La planta de compostaje Huesca se construyó entre el año 2019 y 2020 y ha supuesto una inversión del Ayuntamiento de más de 600.000 euros. La gerente de Grhusa, Teresa Viú, ha remarcado que el objetivo de la planta es “minimizar el impacto de la huella de carbono y fomentar la economía circular, devolviendo a la sociedad el residuo orgánico en forma de materia prima como compost de calidad para el abono”. Además, ha asegurado que los ciudadanos utilizan “muy bien” estos contenedores, por lo que el compost que se obtiene de esta planta “es de muy elevada calidad, ya que la cantidad de porcentaje de impropios que tenemos es solo del 1%”. Se trata de una planta de tratamiento abierto y dinámico en la que se conforman pilas que son volteadas para su aireación y riego. Consta de una solera de hormigón de 2.000 metros cuadrados impermeabilizada y con recogida de lixiviados para garantizar la protección al medio ambiente. Para favorecer el proceso y controlarlo está construida bajo una carpa.