La DGA apoyará la ganadería extensiva en las montañas con un plan de seis millones anuales

La ayuda se solicitará a través de la PAC
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El presidente de Aragón, Javier Lambán, ha anunciado este lunes en la localidad oscense de Fiscal un plan de apoyo a la ganadería extensiva que supondrá un incremento de ayudas de más de seis millones de euros al año en zonas de montaña.

Esta nueva ayuda, que se implementará a través de la denominada Indemnización Compensatoria que se solicita anualmente en el momento de confeccionar la solicitud de la PAC, prevé la elevación del techo de cobro, que actualmente se situaba en 4.000 euros por explotación y año, hasta los 8.000. Esto supone que el importe medio por explotación en esta línea pase de los 3.300 anuales hasta los 6.200, es decir, un 86% más. El monto total adicional de ayuda, que se ha calculado aportará el Gobierno de Aragón a estas explotaciones, supera los seis millones de euros y será efectivo en la solicitud PAC 2023.

Se trata de un esfuerzo significativo de esta administración en aras al mantenimiento de la ganadería extensiva en nuestras zonas de montaña que, además de la contribución a una producción de alimentos cada vez más determinante en el ámbito de la ahora denominada autonomía estratégica europea, redundan en fijación de población en el territorio y el mantenimiento del medio ambiente. Además, se enmarca perfectamente en lo que denominamos modelo estratégico sostenible porque ayuda a poner en valor lo auténtico”, ha explicado Lambán.

La ganadería extensiva recibe en ayudas directas de la PAC en Aragón 115 millones de euros al año, el 26% del total. Sin embargo, señalan desde el Ejecutivo, “esta ayuda presenta importantes anomalías como consecuencia del sistema de derechos históricos y del enfoque de pago por superficie de pastos, en lugar de pagos vinculados a cabezas de ganado y a la propia renta del ganadero”.

448 MUNICIPIOS SE PODRÁN BENEFICIAR

“Es por ello, y por las dificultades extremas para introducir correcciones sustanciales en una política que se ha aprobado a nivel de la Unión Europea y del Estado, que desde el Gobierno de Aragón se plantea una ayuda adicional restringida a los profesionales de ganadería extensiva en las zonas de montaña”, ha explicado Lambán.

El Departamento de Agricultura, Ganadería y Medio Ambiente ha realizado el informe “Análisis de la Ganadería Extensiva de Aragón” y en base a este documento se han confeccionado las ayudas. El estudio determina que, de las 3.935 explotaciones de ganadería extensiva existentes en Aragón, el 70% se sitúan en zonas de montaña, fundamentalmente en las comarcas del Sobrarbe, Ribagorza y Jacetania.

Si bien, la calificación como zonas de montaña en el ámbito de las ayudas europeas, y que por tanto se verán beneficiadas de esta ayuda, se extiende además del Pirineo aragonés a la mayor parte de la provincia de Teruel e incluso a determinadas localidades de la provincia de Zaragoza. En total 448 municipios aragoneses podrán beneficiarse de la ayuda. Además, estas explotaciones se caracterizan por tener un carácter netamente familiar, acreditando sus titulares una elevada profesionalidad (más del 90% de los ingresos de estas familias procede del sector agrario).

El informe pone de manifiesto que la renta de los ganaderos (diferencia entre ingresos y gastos) se sitúa en algo más de 14.000 euros al año. Es decir, más de la mitad de las ayudas públicas que reciben van directamente a cubrir los costes que no quedan resarcidos por la actividad ganadera.

DIFERENCIAS

Esta diferencia, apuntan, “se agrava todavía más en el caso de las explotaciones de ganadería extensiva situadas en zonas de montaña, donde aun recibiendo una ayuda superior que alcanza los 35.000 euros al año, su renta final apenas supera los 12.000 euros al año en determinados casos”. En cuanto a la edad de los ganaderos extensivos, sólo el 19% son menores de 40 años. Sin embargo, casi el 73% de las explotaciones de titulares de menos de 40 años se ubican en zonas de montaña.

En cuanto a la evolución de censos, considerando la serie histórica (2013-2021), se constata un incremento en el caso de vacas nodrizas del 17% en la zona pirenaica y de más del 65 en el resto de zonas de montaña. Respecto a la ganadería ovina, estas cifras son negativas, con bajadas del 5% en la zona pirenaica y del 9% en el resto de zonas de montaña.