El Colegio de Geógrafos califica de “insostenible” la unión de estaciones y pide paralizarla

Desde el Colegio de Geógrafos ven una “falta de rigor” en los datos y estudios de mercado
photo_camera Desde el Colegio de Geógrafos ven una “falta de rigor” en los datos y estudios de mercado

El Colegio de Geógrafos de Aragón ha sido el último colectivo en sumarse al rechazo contra el proyecto de unión de estaciones de Astún y Formigal a través de Canal Roya. Este colectivo ha calificado de “insostenible” esta obra, “sea cual sea su fuente de financiación”, al entender que hay una “clara ineficiencia e ineficacia estructural”, además de implicar “un impacto ambiental y socioeconómico negativo sobre el territorio” que “contraviene” el criterio de los fondos europeos.

Así se ha pronunciado este martes este organismo, a través de un comunicado firmado por su presidente, Rafael Martínez, que insta a los poderes públicos a que “paralicen” el procedimiento administrativo del Plan de Interés General de Aragón (PIGA), así como a “estudiar y decidir” cuál es el “modelo territorial” por el que se apuesta en la Comunidad. Igualmente, sostienen que el turismo de nieve “no es el único modelo ni modo de vida” de la montaña y que debe “adaptarse al cambio climático a la mayor brevedad”.

De hecho, desde el Colegio de Geógrafos ven una “falta de rigor” en los datos y estudios de mercado y creen que “en ningún caso” es una solución de turismo sostenible, definiéndolo incluso como una “clara falta de creatividad”. Además, afirman que no se han tenido en cuenta las proyecciones del cambio climático, que contiene “numerosos análisis sesgados” sobre el impacto paisajístico, “claramente más elevado que el previsto”, y que “carece de estudios y documentación” sobre el impacto económico, con “frecuentes errores y omisiones” e “incoherencia” en el “supuesto incremento de visitantes y la no previsión de aparcamientos y accesos”.

Además, considera que el cálculo de reducción de emisiones de CO2 es “parcial”, ya que “no contempla el ciclo de vida” de los materiales ni las ocasionadas por los viajes del supuesto incremento de visitantes. También ven “carencias” en el funcionamiento de las telesillas, al no estudiar paradas por causas meteorológicas, averías o planes de evacuación.

Por ello, el documento del Colegio de Geógrafos enumera una serie de medidas para adaptar el turismo de montaña a la realidad actual de una forma “real, efectiva, justa y sostenible”. De este modo, proponen realizar un plan de inversiones “a corto y medio plazo” que permita modernizar las infraestructuras al “ineludible escenario” de cambio climático, además de reactivar el Plan de Ordenación de Recursos Naturales (PORN) de Anayet-Partacua para proteger el enclave pirenaico de Canal Roya.

Asimismo, consideran que se debe “romper con el paradigma” de la nieve como un “oro blanco” con “alternativas sostenibles”, aunque, eso sí, sin “demonizar” el turismo de nieve, y demandan planes de vivienda que faciliten la llegada de trabajadores, impulsar una oferta turística “desestacionalizada” e impulsar proyectos de turismo sostenible con los 26,4 millones de fondos europeos.

EL PROYECTO PENDE DE UN HILO

En este momento, podría decirse que la unión de estaciones pende de un hilo después de que la Diputación de Huesca, promotora del proyecto, enviara una carta al Gobierno de Aragón y al Ministerio de Industria manifestando que veía “inviable” cumplir con los plazos del proyecto, por lo que pedía al Ejecutivo que estudiara otras iniciativas que se beneficiaran de los 26,4 millones de fondos europeos.

De hecho, el ala del Gobierno de Aragón en contra del proyecto, es decir, Podemos y Chunta, ya celebraban en redes sociales el “carpetazo” al proyecto. “Habría que poner a Anayeta sonriente. Ha ganado. Hemos ganado. Canal Roya seguirá siendo Canal Roya”, afirmaba el consejero de Vertebración del Territorio, José Luis Soro. “Hoy ha ganado la gente del territorio, el sentido común y la ciencia. Hoy ha ganado el futuro frente al cortoplacismo. Fin de un despropósito medioambiental que nunca tendría que haberse puesto encima de la mesa. La presión social y en el gobierno han merecido la pena”, escribía la responsable de Ciencia, Maru Díaz, que retuiteaba también un mensaje del exdirector general de Medio Natural, Diego Bayona, que pedía que se le “hubiera escuchado”.

Ante ello, el presidente de Aragón, Javier Lambán, se mostraba “respetuoso” con la decisión del territorio, de donde, recordaba, partía el proyecto de unión de estaciones. “Si el propio Pirineo, que es fue quien pidió e impulsó el proyecto, ahora decide que no le interesa, no vamos a imponerles unas inversiones sacrificando las del resto del territorio”, añadía.

Precisamente, para este mismo sábado hay convocada una gran manifestación por el centro de Zaragoza contra la unión de estaciones y el "destrozo" que supondría para Canal Roya. No en vano, ya son más de 60.000 personas las que han firmado a través de Change.org la petición para frenar este proyecto, que suponía la conexión de los dos valles invernales mediante la instalación de 37 pilonas por Canal Roya, uniendo Astún y Formigal en apenas 15 minutos por telecabina.