Hay posibilidad de nevadas ligeras en los Pirineos, el norte de Huesca y la provincia de Teruel
YouTube video

Este fin de semana la bajada de temperaturas y el viento serán los grandes protagonistas dentro del territorio aragonés. Se añadirá otro componente en forma de nieve en algunas zonas de la Comunidad, con posibilidad de nevadas ligeras en los Pirineos, el norte de Huesca y la provincia de Teruel. “Nada en comparación con la borrasca Filomena que azotó a Aragón a mediados del mes de enero”, ha recalcado el delegado territorial en Aragón de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), Rafael Requena, en su comparecencia telemática de este jueves a través de la plataforma Zoom.

Este viernes 19 no solo será una fecha significativa por la celebración del Día del Padre, sino que las precipitaciones gozarán de especial presencia, sobre todo en áreas del Pirineo, el suroeste de Zaragoza y Teruel. Pero el sábado aligerarán su influencia para desaparecer casi por completo en la jornada dominical. Además, se alcanzarán fuertes rachas de viento que superarán incluso los 100 kilómetros por hora, como ya sucedió este miércoles. “Pese a todo, las precipitaciones no serán muy significativas a nivel general”, ha aclarado Requena.

Haciendo balance climático de las tres capitales aragonesas durante los últimos meses, las precipitaciones se han ido ajustando paulatinamente en Huesca y Teruel, llegando en febrero a sus valores habituales, mientras que Zaragoza se ha situado por encima de sus índices normales. En cuanto a las temperaturas, se ha registrado una anomalía claramente positiva (entre dos y tres grados) en febrero en las tres grandes ciudades aragonesas.

Rememorando el temporal Filomena que trajo consigo fuertes nevadas, el 12 de enero se notificó en la localidad turolense de Bello la temperatura más baja de España con -25 grados. “A esto hay que añadir que Calamocha y Teruel ciudad contabilizaron temperaturas de -21 grados, mientras que Daroca anotó -18,5 grados y Alhama de Aragón -18 grados”, ha recordado el delegado, agregando que la borrasca Hortensia afectó a Aragón fundamentalmente por el viento. “La racha de viento más fuerte de España se produjo en la estación de Panticosa, donde se alcanzaron los 178 kilómetros por hora. En el municipio de Andorra se llegó a los 123, y en Valdespartera a los 122”, ha destacado.

Por estos motivos, enero fue más frío y húmedo, con anomalías medias de un grado respecto a los valores habituales. Las zonas del norte oscense y el Jiloca experimentaron anomalías de hasta cuatro grados menos. Por otra parte, las precipitaciones se posicionaron un 77% por encima de los índices corrientes. En cambio, en el mes de febrero las temperaturas aumentaron para estar por encima de lo normal.

Remontándose a diciembre de 2020, Requena ha apuntado que las temperaturas fueron normales, aunque “hubo una anomalía fría en el Pirineo occidental y otra cálida en el valle del Ebro”. Se produjo también un contraste de humedad en las áreas de la Jacetania y el Alto Gállego.

Clima nacional 

Por último, Requena ha matizado que este ha sido el sexto invierno más cálido del siglo, mientras que el pasado invierno fue el más cálido de las últimas décadas. Aragón -sobre todo la zona del valle del Ebro- ha contribuido positivamente a esa anormalidad tanto en lo referente a temperaturas como al carácter húmedo.

De cara al próximo trimestre, hay posibilidad de que las temperaturas estén por encima de lo normal en el este peninsular, Baleares y Canarias. En cuanto a precipitaciones, “no se espera nada fuera de lo normal”, ha manifestado.

LO MÁS VISTO

TE PUEDE INTERESAR