Un termómetro portátil marcaba 68 grados en el suelo de la plaza Santa Engracia de Zaragoza, frente a los 40 que señalaba el mercurio fijo de paseo Independencia. Allí, la Alianza por la Emergencia Climática en Aragón se ha congregado a las 17.00 horas para exigir al Ayuntamiento de la ciudad una actuación urgente frente a las olas de calor, que hoy han alcanzado su máximo en la capital aragonesa.
“Todo esto no se decide el día que viene la ola de calor, como ha hecho este Ayuntamiento con un decreto. Se tiene que planificar y prever con tiempo durante todo el año”. Son las palabras de Olga Conde, representante de la Alianza en Aragón, quien ha sostenido que su objetivo es “hacer de Zaragoza una ciudad más habitable para todo el mundo”. Además, ha señalado que, en ese sentido, han solicitado una entrevista con la alcaldesa, Natalia Chueca, pero que “todavía” no han recibido respuesta. “Nosotros queremos colaborar, nos gustaría más estar colaborando que estar criticando«, ha apuntado Conde.
La capital ha superado hoy los 40 grados y, ante esta situación, la representante de la Alianza por la Emergencia Climática ha lamentado las 12.000 muertes relacionadas con las altas temperaturas el año pasado en nuestro país. “Zaragoza, por su ubicación y por sus características, es una de las ciudades que mas va a sufrir estas consecuencias”, ha defendido.
“Sabemos que estamos en una crisis climática, y que una de las consecuencias de esa crisis son los fenómenos meteorológicos extremos. Lo vivimos el otro día en Parque Venecia y lo vemos ahora con las olas de calor”, ha proseguido Conde.
La principal medida que reclaman es la creación de refugios climáticos en los barrios, a los que la gente “pueda acudir ante estas situaciones”, tal y como ha afirmado Conde. Ha apuntado que se trata de identificar zonas “o bien arboladas, o bien con suficiente sombra, como edificios públicos” para poder acoger a la ciudadanía ante temperaturas extremas, como las de hoy.
Pero no solo urgen a la creación de estos refugios, sino también a “naturalizar” las ciudades. “Lo que no puede ser es que esta plaza que se acaba de hacer sea totalmente de cemento”, ha lamentado Conde, en referencia a la de Santa Engracia. Del mismo modo, ha criticado la reforma de la de Salamero y de los alcorques cementados. “No puede ser que cuando se está planteando que hay que naturalizar las ciudades, porque además hemos sido elegidos por Europa como una de las ciudades que en el 2030 tendremos que ser neutras en carbono, sigamos actuando de la misma manera que hace 30 o 40 años”, ha explicado.
“El bosque de los zaragozanos tiene que estar en las calles y en las plazas, es donde tiene que haber ese arbolado que disminuya la temperatura que nos haga la vida más agradable”, ha concluido.