Los vecinos en el entorno del Pignatelli viven “con miedo a salir a la calle”

Abadía ha querido insistir en que la seguridad pública “es una cuestión exclusiva de los cuerpos de seguridad”
photo_camera Abadía ha querido insistir en que la seguridad pública “es una cuestión exclusiva de los cuerpos de seguridad”

El último altercado en la zona de Pignatelli tuvo lugar la pasada noche del martes al miércoles. En él se vieron implicadas hasta tres personas, unas de ellas sufrió varios cortes en piernas y brazos, sin embargo, según han informado fuentes policiales, “no fueron tan graves como para trasladarlo a un hospital”.

El joven no quiso presentar denuncia y según una vecina que presenció los hechos desde el balcón de su casa “posiblemente se los hizo él mismo”. “Durante la pelea rompieron el cristal de la puerta de acceso a un edificio”, ha apuntado. Además, ha dicho, “tenía problemas al andar”.

“No salimos ni a pasear al perro ni podemos hacer vida normal”, ha relatado la vecina. “Yo llego de trabajar tarde y tengo miedo de que algún día me hagan algo”, ha lamentado asegurando que les insultan, amenazan y no pueden ni siquiera dormir. “El otro día un hombre mayor no quiso darles el teléfono móvil y fueron hacia él en manada a darle una paliza”, ha relatado. Los vecinos, hartos de esta situación, han convocado una concentración este viernes a las 11.00 horas en la plaza del Pilar para exigir soluciones.

Balance de criminalidad

El número de robos con violencia e intimidación en Zaragoza capital ha aumentado un 48,9% en los seis primeros meses de 2019 respecto al año pasado, lo que supone el mayor incremento registrado en España. Entre estos robos, está el realizado mediante el método del mataleón, una técnica de sumisión en la que el delincuente asfixia a la víctima por el cuello para robarle.

La respuesta de las instituciones

Ante esta situación la Delegación del Gobierno en Aragón y el Ayuntamiento de Zaragoza acordaron este miércoles poner en marcha un plan especial de seguridad de carácter permanente y que abarque toda la ciudad.

Ambas instituciones se han comprometido a elaborar un protocolo de actuación, sin plazos, pero reduciendo la delincuencia.

Tanto el alcalde de Zaragoza como la delegada del Gobierno aseguraron que “Zaragoza es una ciudad segura” y para Carmen Sánchez, que reconoció un repunte en la delincuencia, “está habiendo resultados porque se están produciendo más detenciones”.