Interpeñas estudia "in extremis" instalar su carpa fuera de Zaragoza

La solución podría  venir acompañada de algún tipo de “movilización” durante las Fiestas del Pilar
photo_camera La solución podría venir acompañada de algún tipo de “movilización” durante las Fiestas del Pilar

A falta de un mes para que arranquen las Fiestas del Pilar, la incierta situación que atraviesa Interpeñas desencadena ya una acentuada y casi “angustiosa” preocupación entre la Federación y sus más de 7.000 peñistas. Tanto es así, que desde la dirección aseguran que de no resolverse la concesión de un recinto propio a tiempo, se estudiará “buscar apoyos externos” para localizar su carpa fuera de la cuidad. Quizá en un municipio cercano. Una solución “in extremis” que podría incluso venir acompañada de algún tipo de “movilización” durante las Fiestas del Pilar. “No sabemos cuándo, pero algo se hará”, anuncian.

La presidenta de Interpeñas, Sara Priego, ha revelado ante los micrófonos de los medios de comunicación que aún no se ha dado ningún paso en esa dirección, ni iniciado trámite alguno. Que tan solo es un planteamiento, dice, que surge “a la desesperada”, después de percibir la postura inactiva por parte del consistorio a lo largo de estos dos años. En este tiempo, argumenta, “todo han sido buenas palabras e intenciones, pero ningún equipo de gobierno ha solucionado nada, llevándonos a esta gravísima situación”. Un escenario que podría estar arriesgando la supervivencia de la Federación y hasta “la desaparición de muchas peñas”.

Sin ir más lejos, la suya (El Rebullo) ha perdido ya a “cerca de 200 socios”. No obstante, desde Interpeñas recalcan que lo importante ya no es únicamente la pérdida de gente, sino que está en juego toda una “filosofía festiva” compartida por generaciones enteras.

Por todo ello, Priego reprueba asimismo la actitud del Ayuntamiento, asegurando que “en ningún momento” le ha sido presentada una propuesta alternativa. En lugar de ello, apunta, “se han dedicado a echarse la culpa los unos a los otros” y a poner el foco en si la actividad es o no “con ánimo de lucro”. En ese sentido, explica Priego, “nosotros hemos hasta ofrecido donar los beneficios”, porque lo único que se desea es “encontrar un espacio, un punto de encuentro donde los peñistas puedan tener sus fiestas”. Con ese objetivo “seguiremos trabajando” y diseñando “nuevas fórmulas”, afirma.

Aunque ahora mismo Interpeñas se encuentre “en plena lluvia de ideas”, pronto adoptará una determinación “por muy alocada que parezca”, porque Zaragoza lleva “dos años echando a las peñas de la ciudad y de sus Pilares” olvidando que son “parte esencial” de la historia de la cultura festiva de todos.