No tuvo su mejor día el Real Zaragoza en el estadio Fernando Torres de Fuenlabrada. Los blanquillos se pusieron por detrás en el marcador en dos ocasiones, lo que conllevó la derrota final. De esta forma, se acababa una gran racha del conjunto zaragozano, que todavía no sabía lo que era perder fuera de casa en toda la temporada. Eso sí, los blanquillos hicieron méritos suficientes para sacar algo positivo de la localidad madrileña.
La situación vivida este miércoles recordó al guión del resto de partidos. El Real Zaragoza, a pesar de no estar brillante, no fue justo perdedor. Igual que cuando se midió al Cádiz. También mereció más en sus enfrentamientos ante el Málaga y el Lugo. Sin embargo, en esta Segunda División, no vale de nada merecer más, porque no existe la relación entre jugar bien al fútbol y llevarse una victoria.
El enfrentamiento ante el Fuenlabrada fue el partido clásico que se le atraganta al Real Zaragoza en un campo pequeño. El Camp Nou de Reus, Palamós en Llagostera, o el Toralín en Ponferrada son ejemplos de partidos que, por tradición, los blanquillos no saben llevarse. De este tipo de estadios solo falta visitar El Alcoraz, Anduva y el Anxo Carro de Lugo, tres lugares donde las estadísticas del Real Zaragoza mejoran a pesar de sus características.
A pesar de la derrota, los blanquillos se mantienen en cuarta posición, a un punto del ascenso directo y tres por encima del séptimo, el Rayo Vallecano. Los números del Real Zaragoza son buenos, pero deja la duda de haber ganado solo un partido de seis. Es el primer bache de la temporada que esperan superar. Queda mucha liga y los blanquillos están encaminados para verse en la parte alta de la clasificación.
Volver a La Romareda
No hay mejor forma de reconducir el camino que en el estadio municipal de La Romareda. El domingo a las 21.00 horas visitará la capital zaragozana el Mirandés, sumido en la parte baja. El equipo, recién ascendido a Segunda División, todavía no conoce la victoria fuera de casa, y ha sumado un total de dos empates y tres derrotas. Es una buena oportunidad para mantener la posición o, incluso, asaltar el ascenso directo, ostentado actualmente por el propio Fuenlabrada. Los madrileños reciben al Albacete, que suma nueve puntos como visitante.
La afición, como siempre, volverá a su casa para apoyar a su equipo. Una victoria se antoja fundamental antes de viajar a Gijón, y es que el Sporting, a pesar de un comienzo dubitativo, tiene potencial para estar en lo más alto. Sin embargo, no hay que mirar más allá del domingo en La Romareda. El Real Zaragoza quiere ganar y dar un golpe en la mesa para demostrar que el bache ha sido pasajero.