Laínez tenía roto el hueso más duro del cráneo, "difícil de romper con la mano"

Las médicas han afirmado que Lanza debería haberse roto la mano
photo_camera Las médicas han afirmado que Lanza debería haberse roto la mano

Las médicas que atendieron a Víctor Laínez al llegar a la UCI y que firmaron el informe médico de defunción han asegurado este jueves que las lesiones que presentaba “podían ser secundadas por un objeto contundente”. Además, han dicho, “el hueso que tenía roto era la parte más dura del cráneo, que es muy difícil de romper con una mano”.

Las médicas, han asegurado, que Laínez “no tenía lesiones de defensa en manos y piernas”. El estado de la cara de Laínez, han dicho, “era desfigurado, la zona de la nariz tenía una herida externa y otorragia derecha”. Fracturas, han dicho, “que tendrían que haber destrozado la mano de Lanza”.

A Víctor Laínez no se le realizó un examen toxicológico porque según han argumentado las médicas, “si no tenemos un requerimiento judicial no tenemos por qué hacerlo. Se priorizó la supervivencia del paciente en ese momento”. Desde el ingreso de la víctima hubo “un empeoramiento claro” y el equipo médico decidió no hacer más pruebas porque las lesiones “eran incompatibles con la vida”. “Hablamos con la familia para retirar la asistencia y el paciente en menos de cinco minutos entró en parada”, han dicho.

Paranoidismo y desviación psicopática 

Las psicólogas forenses del Instituto de Medicina Legal de Aragón han declarado cómo las tres pruebas que le realizaron apuntan a una personalidad “muy impulsiva” donde la combinación de extroversión, neuroticismo y psicoticismo son bastante altas. “Solo 15 de cada 100 personas puntuarían más alto”, han añadido justificando que esta combinación “sugiere que es una persona muy impulsiva”.

Las forenses aplicaron una prueba que tiene casi 600 preguntas con mucho prestigio para ver las tendencias básicas en su personalidad. En las escalas básicas las dos puntuaciones máximas son de paranoidismo y desviación psicopática. “El conjunto de estos dos rasgos quieren decir que es una persona sin miedo, que tiende a asumir riesgo, puede ser muy sociable incluso con tendencias a seductor, además, cualquier cosa que se le diga va a ser muy reactivo, muy susceptible… No hay ansiedad ni estado depresivo ni ideas raras”, han relatado.

“Reflejan dureza emocional con una personalidad compulsiva, sociable, hablador, divertido, amable… pero es muy emocional”. Una emoción que, han ejemplificado, “en un momento dado puede echar a llorar por empatía como perder el control emocional”. “Es una persona que pierde muy fácilmente ese control emocional y le cuesta recuperarlo”, han dicho.

Además, respecto a la escala de impulsividad de cada 100 personas solo cinco serían más impulsivos que él. “Desde el punto de vista social es simpático con tendencia enérgica, inconformista y poco convencional”, han sentenciado asegurando que “no hay ninguna patología que le impida conocer la realidad”.

La defensa asegura imparcialidad de las psicólogas

La defensa ha tachado de inadecuados a todos los médicos del Instituto de Medicina Legal de Aragón (IMLA), incluidas las dos psicólogas. La recusación es una forma de apartamiento de un juez de un proceso, cuando una parte considera que su imparcialidad se encuentra en duda, sin embargo el juez desestimó esa recusación que la defensa, tras la intervención de las psicólogas, ha vuelto a expresar. El magistrado Presidente del Tribunal del Jurado aseguró que “tras revisar el escrito de recusación no se aprecia argumentos relevantes tendentes a demostrar en qué se han podido beneficiar las personas recusadas o evitar la carga o perjuicio referido”. “Nos encontraríamos más propiamente, a mi juicio, ante la causa tercera de recusación de enemistad manifiesta”, plasmó en el auto.

La psicóloga Cristina Andreu ha defendido que todas las mañanas lee la prensa y retuitea muchas cosas pero ahora, ha dicho, “me voy a contener”. “Antes de existir Vox ya me pronunciaba sobre las autonomías y si ahora coincido con Vox pues bien”, ha añadido. Respecto a la entrevista que la defensa y el propio acusado aseguraron “tratarle mal”, las psicólogas han dicho que “muchas preguntas le pudieron sentir mal porque se le confronta”. Su compañera ha aclarado que ”no valoró ningún trato de hostilidad”, sino, ha defendido, “se lo hubiera dicho y habríamos parado la entrevista”. Respecto a que el acusado estuviera esposado y acompañado con dos policías, han dicho, “es el protocolo de siempre”.

Los forenses de la defensa, los únicos que han declarado ante público y medios

Los únicos forenses que el público y los medios de comunicación han podido escuchar en este juicio después de que este miércoles se decretara la puerta cerrada para los forenses del Instituto de Medicina Legal de Aragón y que han testificado a petición de la defensa han declarado que la fractura del cráneo se trata de una rotura del hueso temporal alrededor de la oreja. Una fractura, ha argumentado el médico forense del Instituto de Medicina Legal de Cataluña, que es lineal y estas “son típicas de cuando alguien se cae hacia atrás”.

“Es una fractura lineal, el hueso no se ha hundido sino que se ha fracturado hacia el interior del cráneo hacia el peñasco del temporal”, ha detallado. El hecho, ha continuado, “es que sabemos que Laínez sufrió una caída y según su altura, el peso o el impacto es favorable con una fractura del cráneo”.

La otra opción, ha explicado el forense, es “un golpe con un objeto”. Sin embargo, el objeto debería ser “lo suficientemente duro y con una superficie de contacto con la cabeza sea amplia como un monopatín o la superficie de una pala”. La justificación, ha expresado, “es que un objeto pequeño habría hundido el hueso y no se hubiera producido una fractura lineal”.

La psicóloga de la defensa ha establecido a raíz de una serie de test que el detenido completó en prisión que “como conclusión general no se puede sacar la conclusión de que lanza presente un trastorno psicótico”. El psiquiatra, también de la defensa, concluye que “eso de que estaríamos ante una persona psicótica y antisocial no se sostiene con sus propios datos y lo que puramente hay es una cortina de humo”.