Este domingo ha tenido lugar la décima videoconferencia de presidentes, en la que el responsable máximo del Ejecutivo aragonés, Javier Lambán, ha insistido a Pedro Sánchez en que el medio rural en Aragón está preparado para llevar a cabo un proceso de desescalada más rápido. De hecho, ha afirmado que cuando la Comunidad Autónoma alcance la fase 2, el Aragón rural “estará preparado para la fase 3”. Eso sí, el presidente aragonés se ha mostrado preocupado tanto por el clima político de crispación nacional como por ciertas conductas incívicas presentes en bares y terrazas: “No puede ser que la insensatez de unos pocos eche por tierra el esfuerzo de todos”, ha recordado.
Lambán, en el capítulo de peticiones a Sánchez, ha planteado la “necesidad de que el medio rural avance a mayor velocidad que el urbano”, que terrazas, comercios y actividad cultural se recuperen con más rapidez que en las ciudades, bien a través de adelantar medidas de las siguientes fases, flexibilizando las condiciones de la actual o dando autorización a las Comunidades Autónomas para “que sean ellas las que adopten las medidas oportunas”.
También ha incidido en pedir, siempre respetando los estándares de seguridad, que Aragón sea considerado como una unidad en cuanto a movilidad, eliminando la restricción de moverse entre sus provincias, y que debería existir además entre “municipios limítrofes entre unas Comunidades y otras”, poniendo el ejemplo de Catalunya, Valencia o Navarra. Ha aclarado que tanto Binéfar como Sabiñánigo, pese a los rebrotes, no quedarán fuera del alivio de restricciones horarias que se aplicará a municipios de hasta 10.000 habitantes porque hasta donde él sabe “no hay ninguna razón para dejarles fuera”.
Turismo y economía
A la DGA, según palabras de su máximo responsable, le han preocupado sobremanera desde el inicio los sectores del “turismo y comercio”. Al mando está Arturo Aliaga, cada día más recuperado tras superar el Covid-19, y esta misma semana, como mucho tardar la que viene, presentará un programa de potenciación y ayuda al respecto. Se trata, según Lambán, de que “se pueda aprovechar en la medida de lo posible la campaña de verano” y que comerciantes, hosteleros o dueños de hospederías puedan verse “resarcidos por las inversiones adicionales que tienen que hacer para cumplir con las prescripciones legales” impuestas por el Gobierno de España por motivos de seguridad.
Al respecto, ha anunciado que será “un plan ambicioso que incluirá ayudas directas a profesionales del sector, autónomos, pymes, tanto para costes de implantación de mámparas, EPIs, etc, como también para la formación del personal ante la nueva situación de prestación de servicios”. No menos relevante sería que Sánchez accediera a aceptar la reflexión de Lambán, quien considera que someter a cuarentena durante catorce días a los visitantes procedentes del extranjero “es una medida muy poco favorable para recuperar el turismo y habría que sustituirla por otro tipo de controles que aseguren el buen estado de salud de los visitantes, pero que no impida que lleguen”.
Ha recordado el presidente la urgente necesidad de un plan de rescate del turismo, que se haga de la mano de Europa, con financiación de Europa, y realizar por tanto campañas de difusión, movilización del turismo nacional, cultural y natural e interior, que es donde “Aragón es más fuerte” y que permitiría “reabrir cuanto antes hospederías, casa de turismo rural y todo el sector”.
Residencias de mayores
En cuanto a las residencias de mayores, el presidente de la DGA también considera que mientras se llega a un acuerdo para cambiar el modelo de las mismas hace falta “tomar medidas porque están sufriendo mucho y han tenido que hacer frente a gastos añadidos para los que no estaban preparadas”.
Por ello, Lambán piensa en “compensar los daños económicos que han sufrido” y, teniendo en cuenta que se encarecerá el servicio, tratar de “no limitar la entrada de personas mayores”, ayudarles a acceder. Además, por ejemplo, de incrementar las retribuciones al personal que allí trabaja. El presidente ha admitido que está dispuesto a colaborar en este esfuerzo, pero siempre que se cumpla con la Ley de Dependencia, que “establece obligatoriedad de que los costes entre DGA y Estado se repartan al 50%” y no como ahora, 87% el Gobierno aragonés y 13% el español”.
También ha recordado que el sistema de financiación autonómico es “insuficiente” y que hacen falta “mucho más dinero que los 16.000 millones de euros” porque “si no será imposible superar esta grave crisis sanitaria y la no menos grave social y económica que vendrá después”.
Proyecto financiado de la UZ
La buena noticia ha llegado por parte de una comunicación del Ministerio de Ciencia, por la que se van a financiar dos grandes proyectos de investigación relacionados con la vacuna contra el Covid-19. Uno lleva el sello de la Universidad de Santiago de Compostela y, el otro, de la Universidad de Zaragoza.
“Como Comunidad autónoma vinculada a los esfuerzos de la ciencia e investigación estamos dando la talla, que es por otra parte lo que cabría esperar de una universidad como la nuestra”, ha afirmado.
