Las residencias sin contagios en 28 días podrán recuperar las visitas a partir del lunes

Los talleres promoverán la participación y la relación entre las personas participantes
photo_camera Los talleres promoverán la participación y la relación entre las personas participantes

La consejera de Ciudadanía y Servicios Sociales, María Victoria Broto, ha confirmado que las residencias de la Comunidad comenzarán desde este lunes su propio plan de desescalada, en el que la principal medida será la recuperación de la visita de familiares a los residentes. Unas visitas que solo podrán realizarse en centros sin ningún caso de coronavirus en al menos 28 días y cumpliendo con estrictas medidas de seguridad.

Así, las visitas deberán concertarse mediante cita previa y podrán tener una duración de una hora. Durante el tiempo en el que el residente esté en contacto con su visita, los familiares deberán hacer uso de los Equipos de Protección Personal (EPI) para evitar contagios. Medidas que tienen como objetivo, según la consejera Broto, un progresivo regreso a la normalidad en el que eso sí se garantice la seguridad de uno de los colectivos más castigados por la pandemia.

Los usuarios de las residencias también podrán volver a salir de los centros para pasear durante una hora al día respetando las franjas horarias en función del municipio en el que se encuentren. Por otro lado, las residencias comenzarán a retomar los servicios que prestaban a sus usuarios antes de la pandemia, como peluquería o fisioterapia.

Mientras estas actividades se reactivan, el Gobierno de Aragón ha anunciado también la puesta en marcha de una línea de ayudas de 1,5 millones para apoyar a las residencias de la Comunidad. Un presupuesto al que podrán acudir para, según Broto, recuperar fondos que han tenido que invertir para luchar contra el covid o la pérdida de ingresos de estos centros.

Aragón mantendrá disponibles sus centros Covid

Además de este progresivo regreso a la normalidad de las residencias de titularidad autonómica, la consejera Broto ha anunciado que el Gobierno de Aragón ha decidido mantener disponibles sus centros Covid habilitados para aislar a los contagiados de las residencias. Una decisión con la que la Comunidad espera estar preparada ante un nuevo brote del virus y evitar su propagación de una manera más efectiva.

Gracias a esta medida, Broto ha explicado que los centros residenciales ganarán además capacidad para acoger a más usuarios, ya que desde la Administración se dejará de exigir el 10% de camas libres que se demanda en la actualidad para poder aislar a posibles contagios.

Una reestructuración del sistema residencial en la Comunidad

Más allá de la desescalada, el paso de la pandemia por Aragón ha dejado patente, según Broto, la necesidad de “mejorar la asistencia” a los usuarios de este tipo de centros. Una cuestión en la que ha coincidido también el presidente de Aragón, Javier Lambán, que ha comparecido junto a la consejera antes del encuentro que ambos han mantenido con el sector de las residencias en Aragón.

Lambán ha abogado por un “cambio estructural” del modelo actual que “indudablemente hay que afrontar”, con aspectos clave como la mejora de las prestaciones de los centros o de la formación de sus trabajadores. Cambios que el propio Lambán ha reconocido que podrían hacer la prestación del servicio más cara, por lo que ha adelantado que desde el Gobierno de Aragón se trataría de aumentar las ayudas económicas para evitar “un sesgo” entre sus usuarios.

Por su parte, la consejera Broto ha explicado otros aspectos de esta reforma “integral” del sistema residencial en Aragón, que incluirá puntos como la mejora de las prestaciones sanitarias en los centros a través de una mayor atención primaria, o la garantía de las medidas de protección a través de una “reserva estratégica de material sanitario” de la que disponer en caso de rebrotes.

Para lograr todo esto, Broto ha incidido en la necesidad de “hacer una reflexión” que pase por “una financiación correcta por parte del Estado”. La consejera se ha referido así al 50% de los costes de la dependencia a los que el Gobierno de España debe hacer frente según la normativa vigente, y que redundarían en una mejor calidad del servicio y retribución a los trabajadores, “los verdaderos héroes” para Broto.