Cuatro son las comarcas aragonesas que han visto cómo en los últimos días la nueva normalidad se disipaba para regresar a la Fase 2. El motivo, los brotes aparecidos en diversas cooperativas situadas en La Litera, Bajo Cinca, Cinca Medio y Bajo Aragón-Caspe y que han llevado la preocupación a los empresarios de la zona. Eso sí, desde las localidades afectadas agradecen la rapidez de actuación para evitar males mayores.
Es el caso por ejemplo de Zaidín, donde Frutas La Espesa destaca por encima del resto por el volumen de trabajadores que dependen directa e indirectamente de su actividad. Su alcalde, Marco Ibarz, quien también es presidente de la comarca, ha reconocido a ARAGÓN PRESS que no saben “a cuánta gente puede afectar”, estando pendientes de que Salud Pública les conceda los resultados definitivos, que ayer alcanzaban los 44 nuevos contagios entre Bajo Cinca, Cinca Medio y La Litera.
Ibarz ha manifestado que en Frutas La Espesa “están dolidos y molestos” porque “se ha focalizado todo en ellos como si fueran los culpables de que el brote haya salido allí”, asegurando que “la empresa ha reunido todos los requisitos que se les pedía como toma de temperatura, geles, mascarillas y guantes”. Por ello, ha insistido en que “no quiere decir que se haya cogido allí” porque “las personas trabajan 8 horas al día y las otras 16 hay que ser responsables, saber dónde nos metemos y las normas que cumplimos porque al día siguiente hay que venir a trabajar”.
En línea similar se ha expresado la alcaldesa de Caspe, Pilar Mustieles, quien ha reconocido que ya había previsión de que podía suceder algo similar ya que hay “mucha población inmigrante y mucha afluencia de personas que se trasladan de un sitio a otro”. Además, ha explicado que los empresarios están “preocupados” y que son “los primeros interesados en que esto no ocurra porque se quedan sin mano de obra, un desastre, y bastante mal está yendo la campaña de fruta por la climatología”.
En este sentido, Mustieles ha valorado que las empresas “han puesto muchas medidas de seguridad” para evitarlo y que el Consistorio estudia desde el inicio de la pandemia ayudas, con un padrón de afectados, que alcancen al comercio y otras actividades para saber en qué medida les ha golpeado esta crisis para ayudarles.
Si en algo han coincidido ambos alcaldes es en destacar la velocidad de actuación por parte de las instituciones, clave para frenar los brotes. “Se ha actuado muy rápido y eso da confianza a la gente al ver que así es mucho mejor porque cuanto más tarde más gente infectada.”, ha comentado Ibarz, mientras que Mustieles ha añadido que ha sido “fundamental”, incidiendo en que “hay que extremar las medidas de seguridad”.
