La S.D. Huesca vence jugando con fuego ante Las Palmas (1-0)

Un tanto de Okazaki daba el triunfo a los locales. Foto: S.D. Huesca
photo_camera Un tanto de Okazaki daba el triunfo a los locales. Foto: S.D. Huesca

Triunfo de la Sociedad Deportiva Huesca ante Las Palmas en un partido en el que apenas encontró oposición en su rival para imponerse por 1-0. Superiores en todo los de Míchel quienes, a pesar de estar a medio gas, les bastó para llevarse los tres puntos con un gol de Okazaki y alcanzar posiciones de ascenso directo. No necesitó brillar dada la nula mordiente de la escuadra canaria.

Míchel apostaba por refrescar al equipo tras vencer en el derbi. Miguelón entraba en lateral derecho, Galán en el zurdo, Doukouré en la medular y Sergio Gómez e Eugeni en la zona de mediapuntas. El mediocentro marfileño protagonizaba la escena más desgraciada del encuentro en el arranque del mismo. En una jugada sin trascendencia ni repercusión alguna por su zona se lesionaba en el talón, a priori de gravedad, y tenía que marcharse del césped en camilla y una vez roto a llorar. Malísima suerte la del futbolista, que volvía a sentirse jugador tras muchos meses de calvario por lesiones.

A pesar de atesorar la pelota en casi la totalidad del tiempo, los oscenses no se acercaron con peligro hasta el 16. Tras un centro envenenado de Miguelón, la pelota acababa en Ferreiro, quien intentaba un escorzo que acababa en córner. Uno después era Josué Sá el que entraba como un toro desde segunda línea, pero se marchaba alto su testarazo. Ahí se volvió a apagar el primer conato de fluidez del choque.

Desde entonces, ritmo bajo de juego, escasa precisión en el pase y la mayoría de balones muriendo por el fondo de El Alcoraz tras envíos largos que no encontraban destinatarios. Sí aportó luz a la oscuridad Sergio Gómez, con una diagonal rápida y posterior zurdazo que se marchaba lamiendo la cepa del poste izquierdo insular. Lo merecía aunque fuera por insistencia el cuadro local y encontró su premio en el descuento. A la contra, con Las Palmas descolocado, gran centro de Ferreiro y mejor testarazo de Okazaki para fusilar la pésima puesta en escena canaria. Con 1-0, al descanso.

Segunda parte

El Huesca controlaba también desde el inicio, pero el primer susto lo daba Las Palmas. Benito enviaba un centro-chut con toda la intención que no anduvo lejos de sorprender a Álvaro en el 51. Míchel reaccionaba con su segundo cambio tras la forzada entrada de Mosquera, dando la opción a Cristo en el lugar de Eugeni. Jugaba con fuego el cuadro oscense por la cercanía del electrónico.

Los siguientes movimientos fueron la salida al césped de Luisinho y de Rafa Mir en detrimento de Sergio Gómez y de Okazaki. Por entonces, los oscenses habían dado un paso atrás, incitando a los visitantes a salir de la cueva. Y, a pesar de las dificultades, lograban asomarse con las arrancadas de Fede Varela a las inmediaciones de un Álvaro todavía inmaculado. La primera vez que tuvo que aparecer fue con un disparo inofensivo, el primero entre los tres palos de los canarios en todo el encuentro. Minuto 77.

La más clara la tuvieron en el 84. Tras un gran centro de Aridai, Mantovani se descolgaba y cabeceaba sin oposición a escasos centímetros de la portería de un Álvaro ya batido. El argentino completaba su pésimo partido con la expulsión que mataba las opciones de los de Mel de puntuar.

Apostaron los oscenses por matar el ritmo del choque en un descuento en el que apenas se jugó, y los tres puntos valen dormir en ascenso directo. Y eso que en el descuento, Las Palmas falló lo imperdonable debajo del arco, sin oposición.