Aragón prevé una caída “inédita” del 13% en su PIB que aplazará la recuperación plena hasta 2022

Cataluña, Aragón y Andalucía presentan el 67% de los proyectos subvencionados
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La pandemia del ha alterado las perspectivas económicas de un año que ya, de por sí, se preveía de aterrizaje tras la desaceleración de 2019. El parón total industrial durante los meses del Estado de Alarma y sus coletazos han situado a España y a Aragón en un contexto “inédito” a escala económica, generando unas expectativas casi de términos “catastróficos”. Así lo aseguran los expertos en la materia, quienes apuntan a un más que probable desplome del PIB aragonés del 12,8% a cierre de 2020, por encima incluso de la media nacional, que sitúan la caída del 12,6%.

La crisis sanitaria no está resuelta y, precisamente, la incertidumbre asociada a este escenario, que plantea incluso próximas nuevas oleadas pandémicas, seguirán resintiendo la actividad económica hasta, al menos, 2022. Son los concluyentes indicios que plantea el boletín de Coyuntura económica de la Fundación Basilio Paraíso, que además incide en que ese margen de recuperación será de carácter moderado, progresivo, rozando el 7,5% en 2021 en Aragón, y del 7,4% en España.

Ante este contexto, el propio presidente de la Cámara de Comercio de Zaragoza y el catedrático de Análisis Económico de la Universidad de Zaragoza y director del estudio de ESI, Marcos Sanso, coinciden en asegurar que la economía arrastrará un “lastre” de potente magnitud también en el ámbito laboral. Así, argumentan que la consecuencia más inmediata de las caídas en mercado de trabajo es el aumento en la tasa de paro. Calculan que podría llegar al 15,71% en Aragón y al 19,39% en España. Todo ello en un entorno en el que resbalón de los precios de las materias primas, en especial del petróleo, ha hecho que la tasa de inflación interanual se sitúe en valores negativos tras ser nula en marzo, del -0,7% en abril, -1% en mayo y -0,3% en junio.

Por lo que respecta el empleo, caen las afiliaciones en prácticamente todos los sectores de forma generalizada salvo en Agricultura, donde aumentan un 8,4% en Aragón, y Actividades sanitarias y servicios sociales, un 0,49%. Entre los descensos destacan Actividades artísticas y recreativas (-19,35%), Hostelería (-15,55%), Actividades auxiliares y administrativas (-14,11%), Otros servicios (-7,62%), Industrias extractivas (-6,65%), Transporte (-6,22%), Construcción (-5,49%) y Educación (-4,81%).

Los indicadores han alcanzado estos meses valores “nunca vistos”. En Aragón, el índice de producción industrial cayó en abril el 41,7% respecto al mismo mes del año anterior, el sector servicios lo hizo con una caída del 0’2% y el comercio al por menor el 35,3%. En cuanto a las exportaciones, en abril cayeron en España un 40% y en Aragón un 54%.

A pesar del “agujero económico” que ha dejado la pandemia y la irreversibilidad de sus efectos a medio plazo, esta nueva crisis económica derivada de la sanitaria, estaría mucho más acotada en el tiempo. La intensidad ha sido mayor que la de 2008, porque el desplome se ha producido “de golpe” en apenas dos meses. Sin embargo, todo apunta a que el periodo de recuperación podría hacerse menos extensivo que la de 2008. Eso sí, insisten los expertos, en que todo dependerá del comportamiento de la onda epidémica.

En ese sentido, Manuel Teruel ha vuelto a hacer un llamamiento a la “conducta cívica” de los ciudadanos, recordando que lo que está en juego: la vida y la economía. Una economía que, en cualquier caso, avista una más que probable reconfiguración, porque la pandemia también ha puesto en jaque al propio modelo productivo. El informe de la Fundación analiza desde el contexto internacional las variables de las economías y todos sus parámetros. De seguir en esta línea, auguran los expertos que el Banco Central Europeo seguirá ejerciendo políticas financieras “laxas” que podrían ser beneficiosas para la recuperación, al igual que lo sería la transmisión de fondos benéficos por parte de la Unión.